Los fondos de emergencia son una fuente de dinero fácilmente disponible, que puedes aprovechar si las cosas en tu vida empeoran. En esta situación, “fácilmente accesible” no significa “meter el dinero debajo del colchón”, como lo hace un número cada vez mayor de personas.
El dinero en efectivo secretado no solo estará sujeto a potenciales desastres, sino que la inflación garantizará que cualquier cantidad que ocultes perderá su valor con el tiempo. Fácil acceso es igual a liquidez, lo que significa que puedes adquirirlo en cualquier momento iniciando sesión en una cuenta y transfiriendo a tu cuenta corriente.
¿Cuál es el mejor momento para crear fondos de emergencia?
Los fondos de emergencia son algo que no debes posponer más, ya que cuando tu techo decida derrumbarse, no lo hará el momento que tu elijas. Si ahorrar una suma sustancial de dinero te parece abrumador, es porque lo estás pensando incorrectamente. Debería estar apartando pequeñas cantidades de dinero hasta que sumen una cantidad considerable de dinero.
Una advertencia: debes liquidar cualquier obligación sustancial de la tarjeta de crédito, antes de crear un fondo de emergencia o hacer cualquier otra cosa con tu dinero. Iniciar un fondo de emergencia con una pequeña cantidad de dinero o una gran cantidad de dinero es la mejor manera de hacerlo.
Esto puede parecer evidente por sí mismo, pero la clave de todo se encuentra en la paciencia. Es posible que obtengas una ganancia inesperada de varios cientos o incluso miles de euros en forma de declaración de impuestos una vez al año. Quizás la ganancia inesperada vendrá en forma de un bono en el trabajo o un regalo financiero de un pariente rico.
Invierte en una cuenta equivalente en efectivo que devengue intereses en lugar de comprar un par de zapatos elegantes o cien cervezas caras. Si estás comenzando desde cero y no esperas grandes ganancias inesperadas, elija el enfoque gradual. Haz un arreglo con tu banco para deducir $50 o $100€ de tu sueldo cada mes y ponerlo en una cuenta de ahorros, lo que puedas pagar.
¿Cuánto necesitas en los fondos de emergencia?
La respuesta convencional del planificador financiero a este problema es que debes tener a mano entre 3 y 6 meses de los ingresos de tu hogar en todo momento en caso de una emergencia. Dadas las realidades económicas actuales, varios han propuesto recientemente que de 8 a 12 meses es una opción preferible. Si tienes suministros para seis meses a mano, deberías poder capear la mayoría de las tormentas.
Evaluar tus circunstancias específicas es un tema que a menudo se ignora. Si tienes un padre o abuelo acomodado en el que puedes depender de apoyo financiero en un momento de necesidad, tus demandas específicas sin duda cambiarán. En cualquier caso, todo el mundo debería tener a mano al menos tres meses de costes.
Obviamente, será necesario calcular tus gastos mensuales para determinar el número mágico. Los siguientes son los principales gastos:
- Casa
- Calefacción
- Servicios públicos
- Ropa
- Comida
- Transporte
- Gastos médicos
Si lo haces correctamente, no deberás tener problemas en acceder a tus fondos de emergencia dentro de uno o dos días después de que suceda algo. Por supuesto, querrás que tu dinero esté allí en su totalidad. Por lo tanto, no es una buena idea mantenerlo invertido en algo ligeramente especulativo, como acciones.