– Españolito Hipotecado (EH) llamando a entidad financiera, ¿me oye?
– Entidad financiera (EF): sí, alto y claro. Cambio.
– EH: Eso digo yo: cambio… La hipoteca de banco.
– EF: ¿mande? No oigo nada. Cambio.
– EH: es mi Scattergories-hipoteca y me la llevo. Cambio.
– EF: te pierdo, no oigo nada. Cambio.
– EH: que digo que ya no te acepto como animal de compañía. Cambio y corto.
Aunque no lo parezca, esta conversación se produjo más de 60.000 veces el año pasado en lo que supone una cifra récord de subrogación de hipotecas según el INE, ese Zeus de las estadísticas que dice que el número de hipotecados que hicieron un corte de mangas a su entidad financiera creció un 16% respecto a 2008, cuando ya había crecido un 7% respecto a 2007.
En estos tiempos de crisis, en los que la pela es la pela más que nunca, muchos hipotecados han pasado de estar con su banco como Pili y Mili a estar como Pimpinela y marcharse atraídos por los cantos de sirena de otra entidad.
Así es el capitalismo: sin piedad y sin escrúpulos; yo te robo los clientes, tú me robas los clientes y aquí paz y después gloria, porque el “yo te doy cremita, tú me das cremita” se queda sólo para los anuncios.
Lo mejor de todo es que ponerle los cuernos al banco está bien visto, ya sea porque te quieres deshacer del suelo de la hipoteca, para encontrar un diferencial más benévolo o porque los otros te prometen el oro y el moro: los muebles de la casa, un crucero, perdonarte parte de la hipoteca… Y próximamente una cita con Elsa Pataky y un tour por el Vaticano.
Otra parte curiosa es que todos creen que ganan, aunque en el caso de los hipotecados está por ver porque mi instinto de espía me dice que estas entidades son todas el mismo perro con distinto collar.
En su caso sí está clara la ganancia: ¿qué es condonar una insignificante parte de la hipoteca a cambio de conseguir un cliente que sabes que paga religiosamente sus cuotas desde hace años y que el departamento de riesgos verá solvente? No tiene precio.
Aunque no se concedan casi hipotecas, con las subrogaciones las que ya hay se mueven más que un palomo cojo. Qué le vamos a hacer si está de moda. Si la madre de la Pajín es tránsfuga, ¿por qué no lo podemos ser los hipotecados?
Ale, a pertrecharse y buscar el mejor postor, prometo que los hay que te dan hipotecas a 45 euros, pero cuidado al adentraros en el lado oscuro porque, aunque no lo parezca, los bancos siguen estando más agarraos que un chotis. Sí, pi. Palabra de Matahari.
Si yo estuviera descontento con las condiciones que me dio el banco por la hipoteca también intentaría cambiarla de sitio.
Una vez en Ajuste de Cuentas (a ver si vuelve este programa porque se aprendía mucho), el gran Vicens Castellanos dijo que los clientes teníamos que perder el miedo a tratar con los bancos y aprender a negociar con ellos porque a veces, con tal de no verse perjudicados a largo plazo, sí aceptan algunas cosas que les proponemos como por ejemplo aplazar el pago de la hipoteca o retrasar un embargo.
El banco prefiere cobrar aunque sea algo más tarde antes que verse con un piso que tendrá que vender y del que tardará más en obtener rentabilidad.
Muchas veces nos da hasta miedo ir a hablar con los del banco. Da la sensación de que les debemos pleitesía y sumisión, y casi agachamos las orejas cuando vamos a reclamar lo que es justo: que nos queremos llevar nuestro dinero a donde nos dé la real gana.
No acabo de entender por qué nos sentimos como con el profe en el colegio delante de los empleados o directores de la banca, si al fin y al cabo ellos son los que viven de nuestros ingresos.
Es evidente que todavía tenemos mucho que aprender.
Por una sencilla razón, Jerónimo: porque en este país nadie nos enseñó nunca a hablar de dinero, porque en este país hablar de dinero se considera vulgar, porque en este país hablar evidencia que eres de clase baja, que los ricos no tiene por qué preocuparse del vil metal.
Parece mentira, pero es así: una rémora del pasado, un vicio colectivo de nuestra psicología.
Sabias palabras, currito… Es cierto que en España está mal visto hablar de dinero, incluso entre amigos. Nunca dices lo que ganas por dos motivos: para que no sepan que ganas más que los demás, o para no sentirte avergonzado por ganar menos.
Aparte de esto, cuando vamos al banco nos sentimos “culpables” por simple educación de sumisión. Como nos han dejado dinero, sentimos que les debemos la vida y nos dejamos engañar y aplastar sin decir ni mu.
Si que es cierto lo de hablar de sueldos, es más, mucha gente dice su sueldo bruto para que parezca que cobra mucho más de lo que realmente se lleva a casa.
Lo de sentirnos que les debemos la vida… ni mucho menos… no son una ONG que nos dan el dinero sino que ellos hacen un negocio MUY GRANDE dejandonos el dinero, es un simple acuerdo comercial, tu me dejas dinero y yo te devuelvo MUCHO más por lo tanto la cabeza bien alta.
Exactamente, es algo del pasado. Yo me considero moderno y estoy rodeado de gente que más o menos también lo es, y no se nos caen los anillos en hablar de dinero o ir al banco a hablar las cosas claras, de tú a tú… Coñe, que tienen nuestro dinero, qué menos que eso!
Tienen nuestro dinero… virtualmente… lo peor de todo es que lo tienen invertido por ahí en a saber donde, porque a veces sus departamentos de riesgos creo que no son muy eficientes…
Pues yo he ido al banco y en más de una ocasión he amenazado, directamente o indirectamente, con llevarme mi dinero de allí si no se mostraban más flexibles en algún que otro asunto. Al final, acaban cediendo (si lo que pides es medianamente razonable, claro).
Jeronomi tu exposicion es muy atinada . como bien lo mencionas , la idioscincracia que domina a la sociedad es el de mostrar reverenacia a aquellos corporativos , o personas que tienen un mayor grado de estudios que nosotros , que se viste de manera mas imponente, etc. Cuando en realidad ellos se sostienen gracias a los usuarios , no nos regalan nada aclaro, es un acuerdo hecho entre iguales, por tanto nos es legitimo ir y confrontar a los empleados de las unidades bancarias.
Estoy de acuerdo, Gonzalo. Yo gestioné con mi banco que me quitase las comisiones derivadas del uso de la tarjeta de crédito y como al principio se mostró reticente hice el amago de cancelar mi cuenta. Con ese gesto todo cambió y se tornaron en palabras amables. Por supuesto, me retiraron las comisiones.
Enhorabuena por el artículo, me ha gustado mucho, tiene un buen humor. Yo creo que cambiar la hipoteca de banco es legítimo porque si nosotros no miramos por nuestros propios intereses nadie va a hacerlo y mucho menos las entidades bancarias.
Está pasando como con los seguros de coches y motos, como no se venden y no hay nuevos propietarios, las aseguradoras se han lanzado en una lucha feroz a fidelizar a sus clientes y a captar a los de la competencia. Por eso ahora es más fácil que antes cambiar la hipoteca de banco: las entidades financieras no quieren nuevos riesgos pero sí a personas que saben que pagan y ya han superado un estudio de viabilidad.
Mucho cuidado con lo de los seguros de los coches; algunos observadores financieros han avisado que, aunque el año pasado bajaron de forma escandalosa, para éste van a subir de nuevo porque las aseguradoras no pueden permitirse el lujo de mantener las cuotas tan bajas.
En cuanto a las hipotecas, ni siquiera aquéllos que presentan seguridad y buenas condiciones consiguen hipotecas. Tengo una amiga de cuarenta y tantos años y con un sueldo estupendo que quería cambiarse de piso a otro con terraza, vendiendo el actual (ya pagado), y no ha conseguido que ningún banco le conceda un crédito. Al final, se ha gastado el dinero en hacer una súper reforma.
Así que tu amiga tenía piso para vender y dinero para hacer una superreforma. Suerte que tiene, no como la mayoría de nosotros, que si no podemos vender no vamos a ver ningún ingreso, y por supuesto no nos sobra el dinero para la superreforma de nuestra vida.
Envidia que le tengo…
Si no te importa exhibir un poco tu intimidad, tu casa, tu vida, tu pareja y qué más sé yo, siempre puedes llamar al programa de Nuria Roca para que unos obreros cañón y un diseñador más ‘pallá’ que ‘pacá’ te cambien el piso y la vida.
Por lo demás, yo tampoco entiendo por qué no le dieron la hipoteca y veo que no fue tan dramático si tenía para la superreforma.
La hipoteca no se la dieron por ser mayor de 45 años y no tener pareja. La nueva discriminación.
No te equivoques, Abandonadita. Mi amiga lo que tiene es un buen sueldo y una casa pagada, lo que hace que disponga de suficiente dinero al mes como para pagar un crédito. Y como para una casa no le dieron financiación, pidió uno mucho menor para hacer la reforma y sí se lo concedieron.
Es la misma situación de tanta gente hace dos o tres años, cuando los créditos se daban a diestro y siniestro y la gente vendía sus casas ya pagadas para comprarse otras con pádel, gimnasio, piscina y discoteca, si me apuras; la diferencia es que ahora los bancos andan con los pies de plomo.
Eso está pasando con muchas cosas, sin ir más lejos, con los operadores telefónicos. Con una sola llamada a Telefónica diciendo que te cambias de compañía, automáticamente te aplican un buen descuento en la factura mensual. Yo lo he conseguido, y creo que hay que intentarlo.
Pues espero, Nacho, que si quiero cambiar de banco no me pongan las mismas pegas que en Telefónica. A mí no me ofrecieron un descuento cuando les dije que iba a cambiar de compañía porque pago una burrada por Internet. Yo tampoco me he atrevido a cambiar de operador y así sigo, pagando lo mismo. Con la hipoteca estamos a ver si le “ponemos los cuernos” al banco actual, pero aún no hemos visto grandes ventajas.
Sí, en Ono también lo hacen. Yo he estado pagando la mitad de mi factura durante años. Es tan fácil como decir que te quieres dar de baja de todo y que es porque tienes problemas económicos.
Yo llevo desde hace unos años haciendo lo del amago de portabilidad en mi compañia de telefonos para conseguir un telefono gratis y descuentos en la tarifa y no me siento culpable por ello, si hacen esas ofertas es porque tienen un margen más que de sobra para hacerlo, yo actualmente con vodafone he conseguido gratis el nokia n97 mini, numeros vip gratuitos, 50% de descuento en la factura durante un año e internet movil gratis.
Imaginaros entonces la estafa que nos están metiendo todos los meses para regalarme todo eso y encima salir ganando.
Lo de las compañías de teléfono en España clama al cielo. Somos los que más pagamos por el servicio más limitado y con la peor atención al cliente. Y es que, con eso de la deslocalización del trabajo, te ponen siempre a una señorita latinoamericana a la que no se le entiende ni pruna. Menos mal que soy bilingüe y puedo solicitar que me atiendan en catalán. Al menos me aseguro de que me atienda un español. Porque no creo que quieran pagar más dinero a un catalanoparlante de Francia o Italia.
Fíate de las otras compañías. Más vale malo conocido que bueno por conocer. Tened en cuenta que esas empresas operan con la línea que Telefónica les alquila. Y como un día quieran incordiar… Yo, por lo único que me cambiaria, dando por hecho que con este oligopolio no puede mejorar la cosa, es para que no me llamen más los comerciales a la hora de la siesta.
A día de hoy conseguir una hipoteca que esté por debajo del Euríbor + 0,50 es casi misión imposible, por eso yo sigo de alquiler y porque no me quiero sentir atada a algo tan gordo como una hipoteca. O eres joven o te ofrecen diferenciales muy altos y condiciones que rozan la esclavitud, el matrimonio de por vida y la servidumbre extrema, así que si tenéis una hipoteca que nos os convence y podéis cambiarla de sitio, hacedlo. ¡Yo lo haría!
Sí pero con mucho cuidado, a ver si os van a dar el timo de la estampita. Los bancos son como Lina Morgan haciendo de tonta en este timo: mira, tengo estampitas, muchas estampitas repetidas, ¿quieres que te dé unas cuántas? Si respondes que sí, cegado por el color del dinero, luego te dan un sobre con muchas cláusulas, letras pequeñas y firmas de cosas que no molan nada.
Al menos Lina Morgan y Toni Leblanc (y por supuesto, toda esa legión de admirables ˝timadores”) cumplían el esfuerzo de embaucar –con arte– al pardillo avaricioso. La diferencia con los bancos es que ellos no tienen arte ninguno y que, por supuesto, su objetivo no es el pardillo avaricioso, sino cualquier hijo de vecino con aspiraciones normales a tener una casa: ni mucho menos hablamos de alguien que se quiera enriquecer a costa del pobre tonto, sino de alguien que sólo aspira a vivir.
A nosotros con lo que nos han embaucado es con la necesidad de tener una casa en propiedad, que parece que si no compras una eres tonto o un pobre desgraciado al que le van fatal las cosas. De esa necesidad ficticia llevan los banqueros iviendo muchas décadas y nosotros pagando hipotecas con intereses desorbitados (bueno, yo personalmente no, que vivo de alquiler).
espero que vayas ahorrando la diferencia entre compra y alquiler y que tengas un buen plan de pensiones para que no te pase como a la cigarra.
En momentos de incertidumbre puede salir rentable alquilar en vez de comprar un piso. La gente piensa que alquilar es echar dinero en saco vacio. Sin embargo, como hay que vivir en algún sitio y no se puede esperar a que bajen los precios, el dinero que te gastes en el alquiler de tres años puede ser menor que la bajada de precios de los pisos. Y de los intereses ya hablamos otro día.
Yo vivo del alquiler y pago un plan de pensiones desde hace años, Brujita. Estuve a punto de comprar hace tres años por la presión de amigos, conocidos y familiares, esa presión a la que se refiere Ismael, y al final opté por el plan de pensiones para asegurarme un poco el futuro, que nunca se sabe. Lo que sí supe fue que el piso que me iba a comprar ahora se ha rebajado nada menos que en 50.000 euros y ahí sigue sin vender. Imagínate los beneficios que se iba a sacar la promotora conmigo si ha podido bajar tanto el precio. Conclusión: Prefiero seguir de alquiler.
Muy cierto Soraya lo que nos declaras. Las pautas que te marcan las entidades bancarias para asi ser participes de un credito hipotecario , te sujetan a un fuerte yugo , que muchas veces no puede ser sostenido por los individuos. Por tanto se tiene que buscar la manera idonea para la adquisicion de un bien inmobiliario , asi dejando un poco de holgura en nuestro estado financiero.
Convengo en que se trata de los mismos perros con distintos collares, por lo que si pensáis subrogar la hipoteca informaros muy bien porque varios conocidos míos salieron de Málaga para meterse en Malagón.
Los bancos buscan su propio beneficio, por ello dudo enormemente que de verdad beneficien a alguien más que a ellos mismos. Si uno parece que te concede algo, te quita otra cosa, y el que te da lo que te quita el otro, ya te quitará otra a su vez. Al final es cuestión de elegir qué prefieres que te den y a qué estás dispuesto a renunciar sin “meneallo” mucho el asunto hipotecario.
Eso es lo que teníamos que hacer todos los españoles con nuestras entidades bancarias. ¿Que me cobras una comisión por hacer una transferencia? Corto y cambio, y me llevo mi dinero a otro banco. Si lo hiciéramos más a menudo no serían tan proclives a tomarnos tanto el pelo.
El mes pasado me llegó el recibo de la visa y me olvidé de meter dinero para cubrirlo: por dos días, el banco lo devolvió. Por supuesto, me quejé y tal, pero nada.
Este mes me ha pasado lo mismo, con la diferencia de que he tardado sólo un día en ingresar. La chica me dijo: “Se devuelve porque el día 25 no había saldo”. Y yo le dije: “Mire, señorita, consulte con quien tenga que consultar, pero como se les ocurra devolverme este recibo, yo cancelo la cuenta. Ustedes verán si prefieren perder un cliente”.
Y me lo pasaron, claro.
Es verdad que son los mismos collares con distinto perro, pero yo he llegado a cambiar mi dinero de banco porque me han querido cobrar por imprimirme un extracto de la cuenta. Me da igual que sea sólo un euro. Es mi euro y se lo regalo a quien a mí me plazca por el motivo que a mí me de la gana.
Hiciste estupendamente, es lo que tendríamos que hacer todos. La pena es que por falta de tiempo o dejadez tragamos con estas cosas en lugar de hacer frente y remediarlas. Si todo el mundo moviera su dinero donde más le conviene, haciendo ver por qué y plantara cara, los bancos tendrían que cambiar algunas cosas con tal de no perder clientes o de captar a los nuevos que están hartos del maltrato de otros bancos.
Un 16% de gente que ha cambiado su hipoteca de banco me parece una cifra bastante alta, y más sabiendo que estos cambios siempre implican dinero. 60.000 personas que debían estar hasta las narices de cláusulas abusivas son muchas personas. Esperemos que los bancos tomen buena nota y se paren a reflexionar, aunque esto es mucho pedir ¿no?
No es mucho pedir pero sí tal vez es mucho esperar. Nunca es suficiente con tal de poner a estos jerifaltes financieros en su sitio. El problema es que les tenemos un respeto que se confunde peligrosamente con el miedo, una sumisión impropia de nuestra posición de clientes y una falta de tiempo perjudicial para gestionar bien nuestros dineros.
Supongo que cada vez estamos más acostumbrados a manejarnos con el banco y cada vez entendemos más de hipotecas. Ahora no es tan fácil como hace algunos años encontrar a alguien que firma un papel sin haberse leído previamente la letra pequeña.
Yo conozco gente que ni abre las cartas del banco, incluso conocí una persona que sabía que le iban a embargar la casa por no pagar la hipoteca y como sabía que la carta era para eso no la abría. Es como si escondiendo el problema o haciendo que no lo vemos consiguiéramos hacerlo desaparecer. Me temo que no, que eludirlo e ignorarlo es mucho peor. ¡A esta gente de los bancos hay que irles de frente y sin miedo!
Así debería ser, porque lo que estamos reclamando nos pertenece. Es evidente que ellos, los bancos, intentarán por todos los medios que no nos salgamos con la nuestra, pero si insistimos, tenemos las de ganar. Al fin y al cabo, estamos pidiendo un derecho que nos corresponde como clientes.
Las problematica que te atañan no puede ser evadida , deben de ser confrontada para asi aportar una resolucion. Muchas personas creen que ignorando los factores que los afectan estan dando una solucion. Una persona cabal debe de responsabilizarse de sus asuntos , es una tendencia en el comportamiento , que debe de gobernarte a lo largo de tu vida.
Claro que hay que cambiar de banco, si todos lo hicieramos, los propios bancos se harían mas la competencia, por lo que los beneficiados seríamos todos nosotros, pero ¡OJO!, a veces hay truco, lo que el nuevo banco te ofrece parece mejor, pero no siempre lo es, te paga la comisión por subrrogación, incluso te baja el diferencial, lo que supone una mínima disminución de cuota, pero a lo mejor te amplía el plazo (valdría para salvar un bache, pero a la postre es negativo para nuestros bolsillos), ahí nosotros ganamos, pero debemos pensar que el banco NO PIERDE NUNCA, por lo que nos va a exigir: seguro de vida (contratado con ellos), seguro de hogar (idem), nómina, nosecuantos recibos domiciliados (con la consiguiente comisión) y un largo etc… Hay que comparar todo al detalle y calcular con mucha calma, si despues de todo nos sale rentable pues “palante”.
Un Saludo a todos.
Eso es. Hay que cambiarse cuando es necesario, es bueno cambiarse, pero estudiando con mucho detenimiento todo porque si no nos podemos meter en un sitio peor o con las mismas condiciones pero llamadas de otra forma. Siempre me deja helada la cantidad de esclavitudes (nómina, seguro de hogar con tal, seguro de vida con cual, etc) que nos obligan a contraer con ellos con tal de prestarnos lo que para nosotros es la llave a un derecho básico y para ellos calderilla.
Estupendo articulo Matahari, siempre con chispa, es de agradecer.
Creo que ya lo comente otras veces, a los bancos ni agua, TODOS nos roban entre comisiones bancarias, tarjetas, recibos… no se salva ninguno. Si vas a tu banco y les plantas cara al final no te cobran estas comisiones, pero claro tienes que ir, perder tiempo, verle el careto al encorbatado de turno, poner cara de mala hostia y al final parece que te lo hacen solo a ti, por que te dicen, chiiiii, te lo quito pero no se lo digas a nadie por que tu eres buen cliente, y a lo mejor tienes 1000 euros en la cuenta.
A reclamar lo que es nuestro y que les den.
¡Muy bien dicho! Muchas gracias, es de agredecer que haya fieles seguidores como tú que lean los artículos con asiduidad.
Lo que tú dices: al banco ni agua. No porque nos estén prestando dinero debemos perdonarles nada ni tenerles miedo. Al revés: deberían estar súper agradecidos que les ingresemos la nómina, los cheques y los ahorrillos, y que cada mes les paguemos unos intereses que son usura encubierta.
Y, además, no debemos perder la perspectiva porque más que prestarnos dinero nos lo están “vendiendo” a precio de oro, por poner un símil. Ellos tienen un negocio y no nos hacen ningún favor si no que se establece un contrato mutuo por el que las dos partes sacan un beneficio.
En efecto. Si les amenazas y no te rindes a la primera que se hagan los despistados, te devuelven lo que es tuyo. Eso sí, has de estar muy atento porque si pueden te la intentarán colar. Más de cinco veces he tenido que ir a reclamar los céntimos que me roban. Tienes dinero en un plazo fijo que se va a renovar y como a partir de las doce del mediodía cuentan como un día nuevo, te restan de tu libreta tu propio dinero y te cobran intereses. Y claro, si no te fijas en los céntimos…
En la nacion mexicana los bancos dan muchas facilidades para recibir un credito hipotecario , pero vemos que el problema mas severo que enfrenta la ciudadania es el de subsistir , pues el Estado no se a abocado a darle los satisfactores ideales a su pueblo , sino que lo ha afligido con una serie de impuestos que no tardara en proyectarse como un movimiento social.
Es verdad que tenemos cierta timidez para hablar de dinero, pero con los bancos hay que empezar a perderla porque ellos no tienen ninguna vergüenza, ni de la buena, ni de la mala.
Es cuestión de que ellos miran por sus intereses y nosotros tenemos que mirar por los nuestros, y punto, que para obras de caridad ya están las ONG y, desde luego, ellos no lo son, así que a informarse, a comparar y si nos cabrean mucho, “corte de mangas virtual”… pero siempre enterándonos bien.
Cada quien debe esforzarme para coseguir lo que tanto anhela , por tanto el refrenar el habla con las entidades bancaria , para asi cambiarse con otro banco , demuestra inconsistencia. Ellos son voraces , moviendo las piezas a su voluntad para asi beneficiarse , y si nosotros deseamos alivianar nuestra carga , estamos en nuestro derecho .
Si estamos en un libre mercado, lo estamos para todo. Y si las empresas se deslocalizan al son del dinero, yo también puedo “deslocalizar mi hipoteca” cuando me parezca. ¡Sólo faltaría! Además, eso es bueno para mejorar la competencia entre entidades, lo cual siempre es beneficioso para el cliente, o sea, nosotros.
Propongo una subrogación de hipotecas en masa, a modo de manifestación, para reivindicar nuestro derecho a elegir. Y a poder ser, que sea a la vez. De paso les damos trabajo y entretenimiento a los empleados de los bancos, que últimamente se aburren mucho.
Hay un video muy bueno en Youtube que demuestra lo buitres que son los bancos y que ví recientemente. Es de una broma del Follonero que hace creer que uno de sus “infiltrados” ha ganado uno de los premios del gordo de la lotería, y se ve a dos docenas de representantes de distintos bancos yendo uno por uno disimuladamente a dejarle la tarjetita al premiado que no era tal. Menudos buitres.
Yo me he comprado ya el “kit de subrogación”, por si las moscas. Se trata de un uniforme de camuflaje con detector de regalos-excusa tipo bolígrafo. Además, incluye una lupa de 20 aumentos, por si pretenden colarme algo en letra pequeña.
un articulo muy diferente a los que estamos acostrumbradfos , gracias por tu aporte.
En la estructura capitalista existe una competencia ferrea por poseer a los clientes, para ellos emplean una serie de artimañans que solo te endulzan el oido , pero que no te proyecta un beneficio como tal . Lo importante es sacar ganancia , no importando que se les tenga que envolver con un discurso muy bien planeado , haciendo que el sujeto se incline a nuestra cobertura.