Cuando el pasado mes de marzo el Euríbor cerraba su cotización mensual en el 1,499% muchos podían pensar que nos encontrábamos ya en el suelo del indicador y que a partir de ese momento sólo cabía pensar en un renacimiento de las cifras para repuntar durante el mes de abril.
Pero la coyuntura económica mundial, y sobre todo europea, así como las nefastas previsiones sobre el futuro han hecho que el Banco Central Europeo no se atreva a tocar el tipo de interés para la zona Euro y ello siga provocando que el Euríbor se mantenga a la baja, acercándose a los valores del marcado por el máximo organismo financiero europeo.
Así, el cierre de la cotización media mensual del Euríbor durante el mes de abril, en el 1,368%, supone una caída de 0,7 puntos porcentuales con respecto al cierre de abril de 2011, lo que, traducido a cuota mensual debería de arrojar un descenso de 60-70 euros mensuales para una hipoteca media, ciertamente significativo en los tiempos que corren.
Una reducción, sin embargo, que no será generalizada, sino que se limitará a la existencia, o no, de una cláusula suelo en el articulado hipotecario, que podría limitar e, incluso, evitar, la reducción de la cuota mensual, en función del valor fijado en el momento de constitución de la hipoteca.
De cualquier forma, lo que parece evidente es que en los próximos meses deberíamos de encontrarnos con un panorama similar, con el Euríbor a la baja. No en vano, la cotización diaria del indicador el último día de cotización, ayer, día 30 de abril, marcará el comienzo del mes de mayo.
Por ello, si tenemos en cuenta que partimos del 1,311%, no sería descabellado pensar que antes del 15 de mayo podríamos estar por debajo del 1,3%, unas cifras realmente preocupantes para las entidades financieras y altamente atractivas para los ciudadanos hipotecados, que pueden empezar a plantearse seriamente una mejoría en su estado económico.
Según los expertos, por otro lado, el Euríbor no debería de incrementar su cotización antes de final de año, y nos encontraríamos con valores continuamente a la baja y acercándose al 1%, aunque no es previsible que lleguen a alcanzar esta cifra.