El Euribor parece ser el único índice estadístico que está haciendo caso a las previsiones, y según se venía venir está creciendo, lento pero estable, mes a mes, cerrando el mes de junio que terminamos ayer en el 1,281%, es decir, 0,024 puntos porcentuales más que en el mes de mayo, cuando cerró en el 1,249%.
Sin embargo, todavía no hay que alarmarse, o no demasiado todavía, porque aún estamos en esa situación en la que todos los que revisen hipoteca en un par de meses, para lo cuál se tomará como referencia el Euribor de junio, pueden estar tranquilos, porque todavía es más bajo que hace un año.
Pero esa situación tiene toda la pinta de llegar a su fin, porque el valor del Euribor ya se está acercando a las cifras del año pasado. El dato de junio de 2010 es el más elevado desde agosto de 2009, momento en el que el índice de referencia estaba en el 1,334%, es decir, que estamos a tiro de piedra.
No obstante, tampoco podemos rasgarnos las vestiduras, porque siguiendo las previsiones y a pesar de cierto momento de pavor ante la crisis griega y el ataque especulativo a España, el crecimiento está siendo muy paulatino, con lo que ninguna hipoteca sufrirá grandes crecimientos en cuota.
De esta manera los consumidores pueden ir adecuando su presupuesto familiar más cómodamente, con un año de margen para prepararse para la siguiente revisión, que volverá a ser al alza, porque mucho me temo que esto no va a parar, amigo, ya que va hacia arriba.
Nadie sabe donde se colocará el techo de este crecimiento del Euribor, pero las previsiones de principio de año hablaban de un Euribor cercano al 2% al final de 2010, y por lo que se está viendo no iban muy desencaminados, aunque, eso sí, parece que se quedará por debajo de ese 2%.
Si la cosa va más o menos normal, es decir, si las economías comienzan a salir poco a poco de la crisis el año que viene, es más que probable que estemos hablando, entonces, de un Euribor sobre el 2,20-2,50%, cifra que debería de mantenerse durante un tiempo.
Pero claro, esto son sólo previsiones, elucubraciones sobre un presente que tenemos ahora, pero vete tú a saber lo que estará pasando dentro de unos meses, vete tú a saber como afecta la subida del IVA a la economía, demasiadas incógnitas para tenerlas todas en cuenta de manera eficiente.
Así que estamos un poco en el alambre, como siempre que se hace una previsión económica.