Si quieres vender una vivienda hipotecada es necesario que sigas varios pasos para realizar el procedimiento correctamente. En primer lugar, la entidad donde tienes tu hipoteca debe emitir un certificado de saldo.
En dicho certificado deberán figurar todos los intereses vencidos no pagados. De esta manera, el comprador, en caso de no subrogar el préstamo hipotecario de la vivienda, se encargará de pagar la deuda.
Lo anterior puede hacerse ante notario, o bien a través de lo que se conoce como Orden de Movimiento de Fondos del Banco de España (OMF BdE).
¿Cómo puedo vender una vivienda hipotecada?
Una vez que se obtiene la Orden de Movimientos de Fondos, la vivienda queda libre del préstamo hipotecario, por lo que ya se puede vender sin cargas. Ahora bien, todos los gastos, salvo que se pacte lo contrario, corren siempre por cuenta del comprador.
El vendedor únicamente tiene que hacer frente a los gastos de escritura de cancelación del préstamo hipotecario, así como la liquidación de las plusvalías municipales. Realmente, vender una vivienda hipotecada es un proceso mucho más habitual de lo que te imaginas.
Principalmente cuando se trata de la venta de viviendas de segunda mano. De hecho, también es posible vender una vivienda con hipoteca pendiente en iguales condiciones que no estuviera hipotecada.
Además, lejos de ser visto como un inconveniente, vender un piso hipotecado representa una gran oportunidad, ya que a menudo se venden a un precio inferior que los inmuebles nuevos o libres de cargas.
Aspectos a considerar
El primer aspecto a considerar cuando quieres vender una vivienda hipotecada es cuánto te costó el inmueble. También debes tener en cuenta cuál es el valor de la hipoteca que te queda por liquidar.
Adicionalmente debes considerar a qué precio podrás vender tu vivienda con préstamo hipotecario. Una vez que tengas claros todos estos aspectos, podrás decidir la mejor opción para vender tu vivienda hipotecada.
En este sentido tienes tres opciones básicamente:
Cancelar hipoteca por venta de vivienda
Significa que deberás hacer lo que indicábamos al inicio. Solicitar al banco el certificado de deuda pendiente, y rellenar el formulario de Actos Jurídicos Documentados. En este caso, una cantidad del dinero que recibas será destinado a cubrir la deuda pendiente. La otra cantidad queda como beneficio de la venta, la cual esta sujeta a impuestos.
Transmisión hipotecaria al comprador
También se puede vender una vivienda hipotecada mediante la transmisión hipotecaria al comprador. Es decir, transmitir la deuda pendiente al comprador del inmueble. A esto se le conoce como subrogación hipotecaria.
Para llevar a cabo este proceso se requiere la aprobación del banco, que será el encargado de analizar el perfil de riesgo del comprador. Tanto el estudio, como los gastos generados, con frecuencia son absorbidos por el vendedor, incluso las comisiones del proceso.
La hipoteca puente
Aunque no es una opción muy habitual para vender una vivienda hipotecada, también es una alternativa disponible. Se realiza cuando se quiere comprar un piso a través de un préstamo hipotecario, mientras que se intenta vender otro inmueble hipotecado.
Básicamente lo que se hace es que en lugar de pagar dos préstamos hipotecarios por separado al mismo tiempo, la entidad ofrece la opción de unificar dichos préstamos. Por lo tanto, puedes pagar en una sola hipoteca una cuota mensual menor.
En este caso estarás obligado a vender la primera vivienda en un plazo de entre 6 meses hasta 5 años.