En medio de este sindiós financiero en el que vivimos, despunta con fuerza la pregunta de qué podemos hacer si nos planteamos en estos momentos solicitar una hipoteca. Porque algo está claro: con los tipos de interés en terreno negativo y la banca famélica de beneficios, nada va a ser como hasta hace unos meses y hay que echar un ojo a la nueva tesitura para ver qué es lo que nos conviene.
En este nuevo medio ambiente hipotecario, las entidades financieras se preguntan qué puede ocurrir si el Euríbor continúa en terreno negativo mucho tiempo, o amplía aún su valor en ese lado oscuro de la gráfica.
Para frenar esta situación, el presidente de la Asociación Española de Banca, José María Roldán explica que los bancos pueden optar por tres opciones.
-Ampliar el diferencial con el Euríbor para proteger márgenes, de manera que el tipo siga siendo pequeño, o incluso negativo, pero el diferencial sea lo bastante grande para que merezca la pena seguir operando dentro del negocio.
-Incluir una cláusula cero, por la que se establezca si el tipo de interés baja de cero no se devuelve el dinero, o lo que es lo mismo, poner una cláusula suelo, pero bien explicada a los clientes, sin trampa ni cartón que dé trabajo a jueces y abogados.
-Decantarse por los tipos fijos, eliminando para ambas partes el riesgo de las fluctuaciones, pero en el entendido de que estos tipos no serán bajos, porque en un negocio a treinta años hay muchas cosas que tener en cuenta y muchos riesgos que cubrir.
De momento, ningún banco se ha decidido abiertamente por ninguna de las tres opciones, aunque Liberbank, que es uno de los primeros en mover ficha, ha preferido la cláusula suelo en cero, pro tener al menos una trayectoria conocida y evitar riesgos.
A mi juicio, el riesgo último de todo esto reside en lo que tantas veces hemos comentado en este espacio: que los bancos no tienen ningún incentivo para conceder hipotecas si no le ven rentabilidad al asunto y saben, además, que el dinero que nos presten a nosotros par una vivienda se lo pueden colocar fácilmente al estado en uno de sus emisiones de de una pública
Buenos días,
En mi humilde opinión es de sentido común que cuando alguien necesita dinero para algo y se lo pide a un tercero, ambas partes tengan un beneficio. El famoso win to win.
En definitiva, que es lógico que un banco te cobre un mínimo, o cuanto menos no te remunere por la hipoteca, dado que es quien te está prestando el dinero para aquel proyecto que quieres realizar. Y todas las operaciones tienen un riesgo que se ha de valorar.