Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el precio de la vivienda libre cayó durante el segundo trimestre del año en un 14,4% en tasa interanual, lo que supone el mayor descenso que sufre este índice desde el año 2007, lo cuál pone de manifiesto que las medidas del Gobierno al respecto mediante la última reforma financiera parece que están comenzando a funcionar.
En comparación con la caída que ya se había producido en el el primer trimestre nos encontramos con que se agudizado el proceso a la baja, ya que en los tres primeros meses del año experimentamos un descenso del 12,6%, es decir casi dos puntos porcentuales menos que en los meses que van desde abril a junio.
El gran problema es que con esta caída ya acumulamos un total de 17, sí, sí, 17 trimestres consecutivos de caída, lo cuál puede ser una buena noticia para aquellos que quieran comprar una vivienda, pero nefasta para los que con su esfuerzo adquirieron una vivienda en los tiempos de burbuja inmobiliaria y ahora se encuentran con que el precio de la misma se está hundiendo, y no nos engañemos, no se trata de grandes terratenientes, sino de gente como tú o yo, clase media que paga, como puede, su hipoteca de manera religiosa.
Una caída que parece haberse acelerado desde principios de 2011, cuando la caída se situaba en el 4,1%. Según los expertos económicos estos descensos se deberían de haber producido antes, pero las reticencias de las entidades financieras a rebajar el precio de las viviendas que habían embargado provocó que los descensos fueran menores de los que determinaba el mercado.
Por tanto, una vez más, nos encontramos con que el sector financiero, responsable directo de la crisis y de la tardía recuperación que estamos sufriendo, se sitúa al frente de las causas de las dificultades que sufren los ciudadanos de a pie, y a pesar de ello siguen recibiendo las ayudas de los gobiernos, lo cuál es, en gran medida, necesario habida cuenta del modelo económico en el que estamos inmersos, el cuál no tiene ningún sentido sin el sector financiero operativo a pleno rendimiento.
subida no habrá hasta dentro de mucho tiempo eso está claro, pero la pregunta es: ¿hasta cuando durará la caida?
Parará, cuando lo que paguemos mensualmente por una hipoteca en unos plazos no superiores a 25 años la cuota mensual no supere un tercio del sueldo medio
Los precios desorbitados que han habido y que aún hay, bajarán, el precio medio dependiendo de la zona se situará a 1.000€ m2 para el piso, 1.400,- € m2 para el adosado y 2.000,- para la vivienda aislada, y hasta que la avaricia y el miedo de la banca y de la política nacional,no se reconvierta en sentido común, esto no cambia.
Es de sentido común no vender a quien no puede pagar, por eso los avales de padres, tios y abuelos. que fácil sería, tasación real y oficial, el que no tenga el 30% como mínimo para dar de entrada que no compre, que se quede como está, que desde luego estará sin riesgos y sin miedos. El banco ya no pediría avales, por el diferencial del 30% y tasación real y oficial, tampoco debería haber suelo ni techo, creo que con euribor mas 0,5 o hasta el 1 debería ser suficiente. y a lo suyo a su negocio de prestamistas que no de usureros que es en lo que se han convertido.
Eso amigo, espera a comprar y si no tienes el 30%, te aconsejo que no te metas en la senda de los elefantes puedes salir mal parado.