Con el índice del Euribor en números negativos por cuarto año consecutivo, muchas instituciones financieras han decidido promocionar y mejorar sus productos de inversión del tipo hipoteca a tipo fijo.
Si te has decidido por este tipo de herramienta, a continuación te contamos sobre las distintas características de cada una de las opciones, para que puedas elegir aquella que se ajusta mejor a lo que estás buscando, así como algunos consejos para elegir la mejor opción.
¿Es mejor una hipoteca fija o variable?
Esta es una de las preguntas que la mayoría de las personas que van a firmar una hipoteca por primera vez se hacen. Lo que recomendamos es que consideres las ventajas y desventajas de cada una de ellas.
Ventajas de firmar una hipoteca del tipo fijo
1. Muchas personas deciden contratar una hipoteca fija debido a su principal característica: durante toda la vida de tu hipoteca, pagarás la misma cuota mensual. Esto es perfecto para las personas que necesitan una organización clara y precisa de sus finanzas, por lo que si este es tu caso, te recomendamos contratarla.
2. No existe riesgo alguno. A pesar de que los indicadores del Euribor han sido favorables en los últimos años, es importante que no consideremos eso como algo default. El valor del Euribor puede llegar a fluctuar, haciendo que nuesta cuota mensual aumente considerablemente. Si decides una hipoteca de tipo fijo, no tendrás que preocuparte con esto.
3. En la actualidad, las hipotecas de tipo fijo rondan en un interés cercano al 2,5% a un plazo de 25 años, la cual es una tasa mucho más favorable que aquellas del tipo variable.
Desventajas de firmar una hipoteca del tipo fijo
1. No podemos acceder a herramientas de ahorro como sucede en el Euribor. La cuota siempre será la misma, incluso si el mercado indica que la cuota debe de bajar como en el caso de las hipotecas variables. Se considera que a corto plazo, las hipotecas del tipo fijo pueden llegar a ser más costosas que las del tipo variable.
2. En el caso específico de las hipotecas de tipo fijo, es el plazo escogido el que determina el tipo de interés. Para obtener un mayor tipo de interés, el plazo deberá ser mayor. Esto es diferente a las hipotecas de tipo variable, ya que en ellas el plazo no afecta al diferencial.
El elegir una hipoteca de tipo fijo o variable, depende sobre todo de la forma en que cada persona organiza sus finanzas, así como lo que espera obtener de esta hipoteca. Por lo general, las personas eligen una hipoteca tomando en cuenta si buscan ahorrar a corto o largo plazo.
Para ahorrar en un corto o mediano plazo, la hipoteca de tipo variable es la que más te conviene, debido a que se prevén valores negativos en el Euribor durante los próximos años.
Sin embargo, si lo que buscas es tranquilidad y constancia, las hipotecas de tipo fijo son las adecuadas para ti.