Archivo de la categoría: Hipotecas

¿Pero de quién son los bancos y las hipotecas?

Le llamamos trastos hasta que nos enteramos de que son nuestros.

Le llamamos trastos hasta que nos enteramos de que son nuestros.

Una de las frases que con más frecuencia escucho en las últimas fechas en boca de cierta progresía es que la banca es culpable de la crisis y la banca debe pagar esta crisis. 

Suena bonito. Suena justicieros. Suena Robin Hood y Curro Jiménez, y por eso nos encanta esa idea a los españoles, tan partidarios siempre de tempanillos, Dionis y otros bandoleros.

Y el caso es que tienen razón, porque la banca puede estar en el origen de esta crisis, por su política errática de prestar a quien no va a devolverlo, de permitir gastar lo que no se tiene y de permitir endeudarse al que nunca ganará lo bastante para cubrir la deuda. La banca es culpable, sí, ¿pero quién puñetas es la banca?

Pues nosotros. La banca somos nosotros, porque la mayoría de los bancos pertenecen en un porcentaje ínfimo a un grupo de accionistas, y el resto a los depositantes de dinero, y a miles, millones de pequeños accionistas. 

Qué parte creéis que tiene toda la familia Botín en el Banco de Santander, por ejemplo? Pues entre todos no suman el 1 %. Y en los demás  bancos, igual, o menos.

¿Y quién es el dueño de las Cajas de Ahorros? Nadie en absoluto. Son entidades que pertenecen a los depositantes, las instituciones y los trabajadores.

Por tanto, cuando decimos alegremente que la culpa de esta crisis es de la banca y que la banca la va a pagar, acertamos de pleno por una vez: la culpa es de todos y la vamos a pagar todos, porque no hay otra bola que rascar. Si pagan los bancos, pagarán los que tengan en ellos su ahorros y sus fondos de pensiones. Pagará tu abuela, mi padre y tú. Pagará mi tío, tu cuñada y yo. Porque esa es la única banca que en realidad existe.

Y a esa banca es a la que se le pide que se quede los pisos y se olvide de la hipoteca a cambio de entregarle las llaves, con eso que llaman dación en pago. Cuando se pide una cosa así, no se está perjudicando a Emilio Botín: se está perjudicando a la abuela, al currela, a todo el que tenga un duro ahorrado.

De lo que pasa en un país donde no vale la pena ahorrar no os voy a hablar ahora. Ya lo hice en una novela, y no quiero repetirme aquí.

Constructores vs. Bancos

Balones fuera que es la crisis

Balones fuera que es la crisis

El Salón Inmobiliario SIMA 2011, que ha tenido lugar este pasado fin semana se inició con la queja de los constructores sobre la falta de crédito que recibía el sector, y ha terminado con esa misma queja, basada en la ausencia casi absoluta de préstamos hipotecarios dirigidos al sector de la construcción.

Y es que los bancos, y entidades financieras en general, han decidido que no están por la labor de arriesgar su dinero en un producto de alto riesgo, como es en estos momentos la promoción inmobiliaria, con la única garantía de una bien inmueble, del que ya andan sobrados en sus balances y que no tiene ninguna salida en estos momentos de crisis.

Ello hace que no se estén llevando a cabo proyectos inmobiliarios, según los constructores y promotores, y está haciendo que éstos acumulen suelo urbanizable que acabará por estallar en otra burbuja inmobiliaria en unos años cuando empiecen a recuperar el crédito.

Por otro lado, los promotores y constructores también han salido de SIMA 2011 reclamando una mayor agilidad de las administraciones públicas que están tardando entre 8 y 9 meses en facilitar las licencias necesarias para iniciar una obra de construcción, tiempo excesivo que alarga los plazos y, evidentemente, encarece los proyectos de manera artificial.

También hay una queja generalizada por la divergencia entre las diferentes estadísticas sobre el sector, que lleva a confundir a los inversores y a los posibles compradores, que no saben si hacerlo ahora o dentro de uno tiempo. Para ello, los promotores y constructores también han solicitado a todos los agentes involucrados que se abstengan de realizar afirmaciones sobre el posible ajuste del precio de la vivienda, ya que ello provoca el postergamiento de la decisión de compra.

En definitiva, los constructores y promotores han salido del Salón Inmobiliario SIMA echando balones fuera, sin tomar la responsabilidad que tienen en su propio apalancamiento como consecuencia de los excesos del pasado, que sí, que parte de la culpa fue de las entidades financieras, pero también fue suya, por moverse en las farragosas aguas del todo vale, y de la búsqueda del beneficio sin paliativos.

Ciudadanos del mundo e hipoteca de todos

Pasaporte de alguno que yo me sé...

Pasaporte de alguno que yo me sé...

De vez en cuando, conviene ir a la fuente de los conceptos, y aunque no haya espacio aquí para grandes profundidades, ni sea el sitio oportuno para ello, no está de más aproximarse a algunas ideas, aunque sea sólo para separar a los que dicen ciertas cosas por maldad de quienes las dicen por ignorancia.

Empezaré por lo mítico: cuando todo era gratis y en cantidades ilimitadas, no había que competir por nada. Había de sobra para todos y los seres humanos vivían en armonía. Un día les gustó la misma mujer a dos hombres, y el mismo hombre a dos mujeres. Y ahí fue necesario competir por conseguir lo que cada cual quería.

Al principio, los seres humanos se organizaron en clanes. Un clan es una familia en sentido amplio, con ramas colaterales acumuladas en unos cuantos a os y generaciones. El hombre primitivo se dio cuenta pronto de que cuanto mayor fuese el clan, se podían cazar animales más grandes, se dormía más porque te tocaba menos veces de guardia y los clanes vecinos sentían menos tentaciones de atacarte para llevarse la comida o las mujeres. Así fue como varios clanes se asociaron y formaron la tribu.

Con la tribu sucedió lo mismo, pero el número de asociados que un ser humano puede manejar en su mente es limitado, por lo que se tardó mucho tiempo, aunque no demasiado, en comprender que cuanto más grande fuese la tribu, se podrían construir mayores cosas y conseguir más fácilmente las que estuviesen en disputa con otras tribus. De este modo, pro razones de lengua o de raza, las tribus se asociaron y dieron lugar a los primeros estados, que fueron los sumerios, los babilonios, los egipcios, etc.

Desde entonces han cambiado muchas cosas, pero algunas permanecen iguales: un estado sirve para construir cosas en común, defenderse en común, abaratar costes y competir de forma más eficiente con otros. En general, un clan no puede competir nunca con una tribu, ni una tribu con un Estado.

Un ser humano tiene individualmente los mismos derechos, ya pertenezca a un clan, a una tribu o a un estado, pero el mundo no comienza con cada nacimiento ni se incendia con cada muerte, y por eso cada familia, cada clan, cada tribu y cada estado dejan en herencia a los suyos los logros y las deudas que hayan ido acumulando en el pasado.

Cuando un grupo, del tamaño que sea, hace caja común y acuerda normas comunes, decide compartir su destino. Esa es la famosa idea de la unidad de destino en lo universal (que no la inventó Franco, sino los redactores de la constitución norteamericana, u otros anteriores, aunque en España se atribuya al franquismo porque somos así de chulos).

Los Estados compiten entre sí, ya sea por recursos o por mercados. Cuando las personas se mueven de un estado a otro, sin pagar por lo que encuentran en el nuevo estado, y haciéndolo suyo por el simple hecho de viajar, están haciendo lo mismo que quien se muda de una casa con la hipoteca sin pagar a una casa con la hipoteca pagada, o con menos años pendientes.

Ser ciudadano del mundo es tenerlo todo pagado en todas partes, y no conozco a nadie tan rico como para permitirse tal cosa. Conozco a algunos que dicen serlo, pero son simples mentirosos y gorrones.

La casa es de todos cuando la hipoteca es de todos. Si la hipoteca de tu casa la habéis pagado tu abuelo, tu padre y tú, desconfiad si el jefe del clan, de la tribu o del estado os quieren hacer socios de inquilinos nuevos que empiezan a pagar desde hoy. Y más aún si os quieren hacer socios de inquilinos que no pagan.

Y si con tu trabajo empobreces a tu clan, a tu tribu o a tu estado comprando lo que otros producen en condiciones peores que las tuyas, puedes pensar que ahorras, pero en realidad te estás suicidando o cavando la tumba de tus hijos. Y todo por creer que la hipoteca es de todos y el mundo es de todos, cuando en realidad la hipoteca la pagas tú y nadie es tan rico como para llamarse amo del mundo.

El Euríbor certifica su estabilización

El balancín del Euríbor

El balancín del Euríbor

El Euríbor ha cerrado el mes de mayo en el 2,147%, en tasa media mensual, lo que supone un incremento de 0,898 puntos porcentuales con respecto al cierre de mayo de 2010, pero de apenas 0,06 puntos porcentuales con respecto al cierre del mes pasado, de abril de 2011.

Por ello, se certifica la estabilización del indicador, después de que durante los meses de marzo y abril se introdujera en una vorágine alcista que no parecía tener fin y que hizo que algunos analistas comenzaran a hablar del 3% a finales de año como una previsión realista y no como el máximo casi inalcanzable.

En cualquier caso, y comparado con el Euríbor de hace un año, la comparación realmente importante, lo cierto es que el incremento de casi 0,9 puntos porcentuales arrojará un incremento en cuota hipotecaria mensual cercana a los 80 euros, para una hipoteca media, una cantidad elevada, sobre todo, si tenemos en cuenta la crisis económica que nos sigue golpeando.

Un incremento que pende de un hilo, del hilo que maneja el Banco Central Europeo, que en su reunión de junio puede insinuar futuros incrementos del tipo de interés para la zona Euro, tal vez después del verano, lo que supondrá expectativas que recogerá el Euríbor, creciendo durante los meses previos al incremento efectivo del tipo de interés.

Y es que los analistas económicos hablan de un tipo de interés entre el 1,75% y el 2% antes de finales de año, lo que obligará a subidas por parte del Banco Central Europeo, con el objetivo de controlar las tensiones inflacionistas que se siguen dando, y de las que es tan temeroso el máximo organismo de supervisión financiera europea.

Por tanto, es posible que los próximos meses sigamos en esta tendencia alcista, sobre todo en comparación con las cifras de 2010, lo que hará que todas las personas que tengan que revisar sus hipotecas durante este año lo hagan al alza, teniendo que pagar más dinero por sus cuotas hipotecarias mes a mes.

Cuotas hipotecarias más elevadas, que se añaden a falta de empleo y a expectativas económicas inciertas e inestables para el futuro, lo cuál no ayudará, de ninguna forma, a la estabilización del país.

Ponen un circo y les crecen los enanos

Los enanos del circo de las entidades financieras están creciendo

Los enanos del circo de las entidades financieras están creciendo

Está claro que de un tiempo a esta parte, las entidades financieras han perdido todo el poder que tenían, al menos de cara a los tribunales de justicia, porque cada poco tiempo conocemos una nueva sentencia condenatoria contra sus prácticas abusivas, demasiado habituales, dicho sea de paso.

La última ha sido la Audiencia Provincial de Navarra que ha sentenciado que un tipo de interés de demora del 18% es claramente abusivo, con lo que todos estamos de acuerdo, y ha condenado a una entidad financiera, que no ha trascendido, a resarcir al cliente demandante.

Evidentemente, esta entidad financiera recurrirá la sentencia, y con ello conseguirá ganar mucho tiempo, pero lo que también es evidente es que tendrá que acabar pagando a los damnificados, a juzgar por el tipo de interés máximo que una entidad financiera debería de cobrar por intereses de demora, según la Audiencia Provincial de Navarra.

Este tribunal estipula que un interés de demora no debería de superar, en ningún caso, 2,5 veces el tipo de interés del dinero en el momento en el que se firmó la hipoteca. Es decir, que si se firmó en 2005, pues 2,5 veces el tipo de interés para la zona Euro de ese año.

Entonces, si tenemos en cuenta que en estos momentos el Banco Central Europeo tiene el tipo de interés del dinero para la zona Euro en el 1,25%, y si a este porcentaje lo multiplicamos por 2,5, obtenemos que el máximo tipo de interés de demora que debería de cobrar una entidad financiera, según la Audiencia Provincial de Navarra, excedería ligeramente el 3%, cifra claramente inferior al 18%.

Una vez más, se demuestra que las entidades financieras estuvieron durante muchos años haciendo lo que querían con los ciudadanos de a pie, que en parte porque desconocían sus derechos, y en parte porque al ser tiempo de bonanza económica nadie se paraba a mirar las cláusulas de los contratos hipotecarios, se limitaban a firmar lo que les ponían delante.

Ahora, con la llegada de la crisis, y con la necesidad como bandera, los ciudadanos se han puesto las pilas y han comenzado a analizar cada cláusula de manera pormenorizada.

Los fantasmas de los pisos. Hipoteca, abandono y soledad

El fantasma de Seseña

El fantasma de Seseña

A la prensa internacional, y muy en particular a la anglosajona, le encanta hablar del problema de ladrillo español, por una parte porque muchos de sus compatriotas tienen dinero metido aquí y por otra, hablando claramente, porque es su modo de decir “mira esos mierdas, que pensaban que eran alguien…”.

La más famosa y emblemática de estas urbanizaciones es la de Seseña, por supuesto, diseñada para miles de familias y con menos de un centenar de vecinos en la actualidad. La otra que les encanta, por el batacazo que se metió, es Ciudad Valdeluz, en Guadalajara. Y lo que más risa les da, quizás para no mirar hacia dentro, es que hay miles de familias hipotecadas pro treinta años en unas urbanizaciones que no se habitarán nunca, lo que implica que la banca española, supuestamente saneada, tiene metidos ahí sus activos y sólo se salva de la quema porque nadie les obliga a valorar esos bienes a su valor actual.

Las otras presas elegidas por The Guradian, el New York Times y el Business Insider son Horche (junto a Ciudad Valdeluz, en  Yebes), las de Quer, Alovera y Chiloeches (también en Guadalajara), Yuncos (Toledo), La Serena (Murcia) o la urbanización granadina de Ojo del Salado y Chimborazo.

Y hay más. Seguimos nosotros:

Costa Esuri (Ayamonte, Huelva), La Muela (Zaragoza), Costa Miño (A Coruña), , El Toyo en Almería, , parte del Señorío de Illescas (Toledo) o La Torre Golf Resort (de Polaris) en Murcia.

Y lo peor de todo es que estas urbanizaciones fallidas son sólo la parte más visible del problema.  Lo malo, lo verdaderamente malo es que en cada ciudad, grande mediana o pequeña, hay dos o tres barrios a medio construir, con bloques deshabitados, o batidos por el viento. En León, tenemos La Lastra. 

¿Quién se anima a hablarnos de lo que hay en su ciudad?

P.D:  Hemingway, que era norteamericano, vino a escribir sobre la guerra civil española porque no tenía ni coraje ni vergüenza para hablar de la discriminación racial ni del exterminio de los pueblos indígenas en su país. Sí, en aquel mismo año 36. O sea que la cosa, con ser cierta, no es nueva.

Hipoteca, empresa y papeleo

Busca el inicio de tu empresa

Busca el inicio de tu empresa

Lo he estado buscando, pero todavía no he encontrado el dato de qué puesto ocupa España en un hipotético ranking de papeleo y gastos para comprar una vivienda o constituir una hipoteca, pero lo que sí he encontrado es que somos el país número 147 del mundo donde es más fácil crear una empresa. El dato procede del la tabla Doing Business, elaborada por el Banco Mundial y la International Financial Corporation.

Sí, habéis leído bien: hay 146 países en el mundo donde es más fácil montar una empresa que aquí. 146 países donde te ponen menos trabas y cortapisas, donde es más fácil tener una idea, arriesgar el dinero y ponerse a trabajar y crear trabajo.

El país que está en cabeza es Nueva Zelanda, seguido de Canadá, Australia y Singapur, y el país que está justo antes que nosotros, o sea en el puesto 146, es la República Democrática del Congo. En el puesto 135 está Burundi y el el 137 Uganda. Con esto, creo que ya está dicho todo, pero aquí os dejo el enlace a la tabla, para que lo veáis por vosotros mismos.

Ante semejante despropósito, de poco sirve acampar en las plazas para pedir que las cosas mejoren. Mientras no seamos capaces de dar facilidades a quienes quieren crea riqueza, mejor dejar en casa el perro (y la flauta), porque no las mejoras provienen de la buena gestión y de lo que seamos capaces de ofrecer, no del voluntarismo de que apretar los ojos para soñar.

Como decían por otro lado, una de las palabras españolas más difíciles de traducir al inglés es la palabra “gestoría“. Mientras en España las gestorías sean un negocio boyante, el país no levantará cabeza. Mientras tengamos que meternos entre pecho y espalda los costes y demoras de los notarios, los registradores y demás canónigos laicos, no seremos una economía moderna.

El papeleo nos come, pero el papeleo se autoregenera mediante convenios colectivos del sector público, privilegios de ciertos colectivos y laberintos circulares que devoran paso a paso la riqueza y las ganas de emprender.
Luego, con el resto, con lo poco que queda, vamos tirando. ¿Qué tiene de extraño que estemos como estamos?

Saber lo que se pide o pedir lo que se sabe

Vamos por partes

Vamos por partes

Como diría Jack el destripador, vamos por partes. Por un lado, es evidente que la dación en pago es una opción más que plausible, y que garantiza que cualquier titular hipotecario salga bien parado de una situación de embargo, ya que con la entrega de la vivienda daría por finalizada la deuda con la entidad financiera.

Por tanto, es evidente, y el que no lo quiera ver es porque los intereses creados le ciegan la vista, que la dación en pago es una ventaja para los hipotecados y una desventaja para las entidades financieras, lo que explica que unos la pidan y los otros la nieguen.

Sin embargo, como todo en esta vida, las decisiones no son neutras, siempre acarrean una consecuencias en forma de contradecisiones por la parte que se ve perjudicada por la decisión que se tomó. Y, como no podía ser de otra forma, la implantación de la dación en pago en nuestro ordenamiento jurídico hipotecaria traería consigo una serie de reacciones por parte de las entidades financieras.

En primer lugar, dejarían de financiar las viviendas al 80% del valor de tasación. Sabedores de que dependerán del valor del inmueble en el momento del embargo para poder saldar la deuda de su cliente, se cubrirán las espaldas reduciendo ese porcentaje, seguramente al 60%, pudiendo llegar al 70% en momentos de bonanza. Así que, como primera consecuencia tenemos menos dinero financiado y, por consiguiente, menos ciudadanos con posibilidades de comprarse una vivienda.

Pero, por otro lado, las entidades financieras tendrán un mayor riesgo de pérdida real de dinero. Por ejemplo, en una situación como la actual, con depreciación de los inmuebles, y falta de mercado para la venta de los mismos, las pérdidas serían terribles. Por ello, se cubrirían las espaldas subiendo sus márgenes de ganancia, ¿qué significaría esto?, mayores diferenciales.

Con mayores diferenciales aplicados sobre el valor del Euríbor, los hipotecados se encontrarían con un tipo de interés más elevado para sus hipotecas, lo que dificultaría aún más el pago de la cuota mensual y las posibilidad de llegar a fin de mes de manera desahogada.

Por tanto, con la dación en pago habría menos hipotecas y más caras, ¿estamos dispuestos a admitirlo? O mejor dicho, ¿los que claman por la dación en pago están dispuestos a aceptar estas condiciones de juego?

Yo, por mi parte, apuesto por mantener las cosas como están, con hipotecas baratas y al alcance de todos, unido, eso sí, a la responsabilidad tanto individual como corporativa, por parte de las entidades financieras.

Zapatero y la dación en pago, ¿insinuación electoral o promesa velada?

Tú me das el piso y yo te cancelo la hipoteca

Tú me das el piso y yo te cancelo la hipoteca

Todos sabemos que los mítines electorales son muy dados al exceso, al histrionismo y al prometer todo lo que se pueda prometer, que de cumplirlo ya veremos. Pues bien, en uno de sus últimos mítines electorales, Zapatero insinuó la posibilidad de incluir la dación en pago en la legislación hipotecaria actual.

No pronunció el concepto maldito, a ello no se atrevió, pero sí dijo que el Gobierno estaba trabajando para solucionar el problema de los embargos hipotecarios, y descartadas las opciones de nuevas modalidades de moratorias, habida cuenta del nefasto resultado de la ya planteada por el gobierno, y sin margen por parte de las entidades financieras para incluir nuevos períodos de carencia, todo apunta a la aparición de la dación en pago en nuestra legislación hipotecaria.

Ahora bien, si lo había pensado antes de las elecciones, está claro que después de la debacle que ha sufrido el partido socialista, puede que Zapatero haya decidido guardar esta opción en el cajón ya que ante la debilidad con la que se presenta ante el año de legislatura que le queda, no creo que se atreva a echarse encima a todo el sector financiero, contrario a la dación en pago.

Otra opción es que el PSOE, no ya Zapatero, se guarde la bala de la dación en pago en la recámara para la campaña electoral de las elecciones generales, ante las que tendrá que presentar, sin duda, un programa revolucionario y claramente progresista, al menos si quiere amortiguar la caída.

En cualquier caso, esta insinuación de Zapatero ha hecho saltar las alarmas del sector financiero, que ha vuelto a poner de manifiesto las consecuencias negativas que, en principio, tendría la implementación de la dación en pago en el articulado de los contratos hipotecarios.

Estas consecuencias negativas se centran en la reducción del porcentaje sobre el valor de tasación de la vivienda que concedería el banco, reduciéndose al 60-70%, y al incremento del diferencial sobre el Euríbor que tendría que pagar el cliente mes a mes.

Ello reduciría el número de familias con posibilidad de adquirir una vivienda, aunque, a su vez, serviría de filtro para evitar las situaciones dramáticas que hemos vivido durante la crisis.

Hipoteca y elecciones

Preparémonos para el asalto

Preparémonos para el asalto

Durante todos estos días han puesto al máximo la licuadora de sesos de la campa a electoral, y estamos un poco cansados del asunto, pero creo que es el momento de comentar aquí la influencia que vana tener estas recientes elecciones en el tema hipotecario.

No creo arriesgarme demasiado si afirmo que muchas administraciones han echado los restos en estos últimos meses, tratando de mantener una imagen de normalidad y hasta de soltura con el gasto y el desempeño de sus funciones, pero a partir de hoy eso se va a acabar. A partir de hoy es muy posible que desde Europa nos aprieten un poco más las clavijas exigiendo las reformas que debían haberse realizado hace años y que sólo muy tímidamente comenzaron a realizarse hace unos meses, convertidas en aguachirle edulcorada al menor signo de protesta.

A partir de hoy los bancos pueden endurecer de nuevo las condiciones de las hipotecas y no es descartable que se les empiecen a pedir nuevas ratios de solvencia. A partir de hoy se habrá terminado la tregua para hablar abiertamente de ciertos asuntos, como quién va a mandar en las cajas, cuales sobrevivirán y cuales se irán a pique con el capitán saludando en proa y la banda de música tocando en cubierta.

A partir de hoy, amigos, y durante un tiempo, comienza el enfrentamiento con la realidad. Nos salvará que hay elecciones generales en breve y que tienen que intentar mantener a flote no sólo el barco, sino la ilusión de los marineros, pero la pólvora para cohetes se ha terminado.

En la administración, para todos, y en los bancos para las hipotecas. Pero como dije aquel sargento inglés en las trincheras de la Primera Guerra Mundial: “bueno, chicos, ¿no esperaríais vivir para siempre, no?

Tomémoslo con humor.

Comparador de hipotecas

No son iguales...

No son iguales...

Como sabéis, en esta página ofrecemos toda clase de cálculos de hipotecas, incluyendo algunos más inusuales, como el que realiza el cálculo del esfuerzo hipotecario o la calculadora que nos permite calcular cuánto nos darán de hipoteca dependiendo de nuestra condiciones financieras y nuestro endeudamiento previo.

Sin embargo, y para que veáis que no todo es alabarnos a nosotros mismos, hasta ahora no tenemos un comparador de hipotecas, y aunque estamos trabajando en él, no queremos dejar de hablar a nuestros lectores de lo que es esta herramienta.

Un comparador de hipotecas es una aplicación web o cualquier otro sistema informático mediante el cual, aportando distintos datos sobre el producto que deseamos, se nos ofrece información sobre las distintas opciones que hay en el mercado para encontrar la hipoteca que más se ajusta a nuestras necesidades.

 El comparador de hipotecas envía los datos que aportamos a distintas entidades financieras y nos informa de las condiciones que estas entidades ofrecen para el producto que necesitamos, con sus distintas condiciones de diferencial sobre el Euribor, cancelaciones parciales, comisiones de apertura y requisitos añadidos, como la contratación de seguros de vida, nóminas, o si las condiciones son válidas para clientes nuevo o sólo clientes que tengan contratados previamente algunos servicios.

Algunos de estos comparadores de hipotecas nos sirven simplemente los datos para que tomemos nota, pero otros incluso permiten contactar directamente con las entidades financieras para solicitar más información o que se confirmen los datos ofrecidos pro el comparador de hipotecas.

Mientras acabamos de programar nuestro propio comparador de hipotecas, nos queremos recomendar ninguno en particular, pero un rápido vistazo a internet os permitirá encontrar alguno que complemente los cálculos que habéis  hecho en nuestra web.

Suerte.

En Estados Unidos sí que saben depurar responsabilidades

Las dos caras de la verdad

Las dos caras de la verdad

Mientras en Europa seguimos aceptando que las entidades financieras necesitan nuestra ayuda, sin más, sin ninguna contraprestación, en Estados Unidos sí que saben lo que tienen que hacer, y después de haber ayudado a su sistema financiero, y una vez que parece iniciarse la recuperación, van a comenzar a depurar responsabilidades.

Tras varias noticias al respecto, ahora hemos conocido que la Fiscalía de Nueva York va a investigar a tres de los gigantes financieros de país norteamericano, como son Bank of America, Goldman Sachs y Stanley Morgan, por su actuación durante los años de burbuja inmobiliaria.

Concretamente, la Fiscalía investigará los hechos por los cuales estas entidades relacionaban la deuda que compraban sus clientes con hipotecas tóxicas, sabiéndolo, y, lo que es más grave, sin informar a sus clientes.

Ello supone un ejercicio de irresponsabilidad financiera que dañó a sus clientes, y ahora tendrán que responder ante la justicia por ello, y algunos analistas esperan multas multimillonarias.

Y es que ese fue el origen de todos los males. Las hipotecas tóxicas que manejaban las entidades financieras estadounidenses, que luego comenzaron a vender internacionalmente en paquetes de deuda, que estallaron en las manos de los inversores en cuanto se pinchó la burbuja inmobiliaria en Estados Unidos.

Estas hipotecas tóxicas se caracterizaban por estar concedidas a clientes sin la solvencia necesaria como para hacer frente al pago de sus deudas, salvo con una vivienda claramente depreciada, lo cuál generó pérdidas millonarias en todas estas hipotecas.

No debemos olvidar que en Estados Unidos sí que existe la figura de la dación en pago, por lo que hipotecas de, por ejemplo, 100, se vieron saldadas con inmuebles que valían 80, y ni eso, porque no había forma de deshacerse de ellos en el mercado.

Pero lo verdaderamente destacable de la noticia es que el gobierno de Estados Unidos sí que se está poniendo las pilas contra los bancos que generaron toda esta situación que estamos viviendo, y está dispuesto a depurar las responsabilidades que se hayan podido generar.

En este sentimiento de responsabilidad personal y empresarial, en Europa tenemos todavía mucho que aprender de la cultura anglosajona.