Archivo del Autor: Edmart Rusan

Vaya semanita para el sector inmobiliario

¡Vaya semanita!

¡Vaya semanita!

Está claro que hay semanas en las que es mejor no levantarse de la cama, y estos últimos siete días han sido una de esas para los promotores inmobiliarios que se han visto envueltos en toda una retahíla de malas noticias que no hacen sino ahondar en su depresión permanente.

Si la semana pasada conocíamos los datos del Ministerio de Fomento que hablaban de casi 700.000 viviendas construidas pero sin vender en nuestro país, ayer mismo el Instituto Nacional de Estadística dio otro varapalo importante para todos aquellos que creían ver el comienzo de la recuperación en el sector inmobiliario.

Se trata de la estadística sobre las compraventas de viviendas que el INE viene haciendo desde el año 2007, y que en este pasado mes de mayo arrojaron un descenso del 18,3% con respecto al mismo mes del año anterior, unas cifras nada halagüeñas.

Sí es cierto, sin embargo, que se ha producido cierta mejoría con respecto a los datos de abril, cuando se marcó el mínimo histórico con 24.100 operaciones de compraventa realizadas (mayo ha cerrado con 30.797), pero esa mejoría debe de ser claramente relativizada.

Los datos de abril fueron artificialmente bajos como consecuencia de la resaca producida por el adelantamiento de compra generada por la eliminación de la universalidad de la desgravación fiscal por compra de vivienda generada en los meses de noviembre y diciembre, recogida estadísticamente en enero y febrero, por el desfase temporal que existe desde que se realiza la compraventa y se registra de manera oficial.

Por ello, era normal que mayo fuera mejor que abril, pero esa no es la comparación que debemos de realizar, y sí que se debe de realizar con mayo del año pasado, y ahí es donde los datos de este año salen claramente perdiendo, perpetuando la sensación de que seguimos en crisis en el sector inmobiliario.

Una crisis que está claramente lastrando a la economía en su conjunto, porque vivimos un momento en el que otros sectores sí que han iniciado su senda de recuperación, ofreciendo ya datos positivos, algo que ni tan siquiera se puede atisbar en lo que se refiere al sector inmobiliario y de la construcción.

Tú también, Senado (le dijo la dación en pago a los políticos)

El Senado también falla a los que apuestan por la dación en pago

El Senado también falla a los que apuestan por la dación en pago

Imitando a su hermano mayor, o menor, o lo que sea, el Senado también ha rechazado la propuesta del BNG para implantar la dación en pago en el ordenamiento jurídico español, y lo ha hecho de la misma forma que sucedió en el Congreso de los Diputados, es decir, con el voto en contra del PSOE y las abstenciones de PP y CiU.

Supongo que a partir de ahora el BNG dejará de pedir la dación en pago por activa y por pasiva, y se conformará con dejar las cosas como está, o a lo mejor no, a lo mejor sigue haciendo retórica política. Los que han votado en contra, por su parte, se conforman con poner sobre la mesa el incentivo fiscal para las hipotecas de responsabilidad limitada que se aprobó la semana pasada en el Parlamento.

En cualquier caso, y vista la situación de permanente reivindicación en favor de la dación en pago, creo que todos, como ciudadanos deberíamos de plantearnos si realmente queremos esta figura en nuestro ordenamiento, o si se trata sólo de una solución que vemos en una situación de emergencia nacional.

Porque todos debemos de tener claro que la dación en pago provocará hipotecas más caras y menor porcentaje sobre el valor de tasación. Eso es un hecho que debemos de aceptar, porque se da en países que, como Estados Unidos por ejemplo, tienen implantada la dación en pago.

Los diferenciales aplicados son mucho más elevados, y mientras que en España estamos pagando un 3%, aproximado, en nuestras hipotecas hoy, en Estados Unidos están por encima del 6%, ¿estaríamos dispuestos a pagar un 6% de interés en nuestras hipotecas?

Yo, particularmente no.

De la misma forma, si ahora nos parece poco que nos ofrezcan el 80% del valor de tasación como cantidad máxima (salvo excepciones que puedan llegar al 100%), con la dación en pago será muy difícil que la entidad bancaria se arriesgue a superar el 70%. ¿Estaríamos dispuestos a obtener sólo un 70% de financiación sobre el valor de tasación?

Yo, particularmente no.

Entiendo el drama social que están suponiendo los embargos y los desahucios, pero no creo que la dación en pago sea la solución. Prefiero hipotecas baratas sobre la responsabilidad de los ciudadanos, que hipotecas caras para penalizar la irresponsabilidad de los mismos.

La deriva izquierdista de Rubalcaba

¿Próximo Presidente del Gobierno?

¿Próximo Presidente del Gobierno?

Fíjate tú que ahora resulta que Rubalcaba es un peligroso izquierdista y nosotros no nos habíamos dado cuenta, y mira que habíamos tenido oportunidades, porque años, lo que se dice años, lleva unos cuantos en el poder ocupando diferentes posiciones, pero hasta ahora se había mostrado siempre como un hombre comedido y conciliador.

Sin embargo, ha sido ocupar el puesto de candidato socialista a las próximas elecciones generales e iniciar a desandar el camino andado por Zapatero, tratando de recuperar al votante de izquierda, ése que se ha quedado fuera de la retórica socialista neoliberal del último año.

Rubalcaba, que de esto sabe un rato, quiere paliar la pérdida de votos que su partido sufrió en las últimas elecciones autonómicas y municipales para lo que ya ha comenzado una campaña de reclamo para movilizar a esa parte de su electorado.

Y ha comenzado de la manera más sencilla, con algo que siempre funciona como es el ataque a las entidades financieras, responsabilizándolas de todo lo que ha sucedido en estos años debido a su irresponsabilidad al medir los riesgos de las hipotecas que concedían, tanto por la dificultad de pago de sus clientes como por el exceso de capital prestado sobre el valor de tasación.

No diremos que le falta razón a Rubalcaba, pero se olvida de la cuota de responsabilidad del ciudadano, a la que no hará mención, por supuesto, para no perder ni un solo votante. Porque tanta responsabilidad tiene la entidad que concede una hipoteca con demasiado riesgo como el ciudadano que la toma sin plantearse el futuro.

En cualquier caso, no me extrañaría que en los próximos meses Rubalcaba comenzara a solicitar la dación en pago como la medida que puede resolver todos los problemas de los ciudadanos españoles. De momento, ya ha anunciado que conoce la manera de acabar con el desempleo en nuestro país.

Ahora todo es cuestión de que nos acabemos de creer si las palabras de Rubalcaba son pura retórica, o si en su discurso hay algo de fundamento al que aferrarnos de cara al futuro, desolador tanto si gana uno como si gana otro.

CiU sí propone cosas

Unos peleándose y otros lanzando propuestas

Unos peleándose y otros lanzando propuestas

Aunque parezca mentira vivimos en tal situación de bloqueo político que el mero hecho de que un partido se dedique a proponer alternativas, en lugar de a tirar los trastos a la cabeza de sus rivales es algo que debemos de celebrar, y en este caso ha sido CiU, que en el marco del debate sobre el estado de la nación ha lanzado varias propuestas más que interesantes.

Por un lado ha abogado firmemente por la dación en pago para el futuro. No como figura obligada en todos los contratos hipotecarios, pero sí como una opción que el cliente pueda tomar. Pero para lanzar esta alternativa no se limita a ofrecerla sin una fundamentación, sino que ha propuesto una serie de incentivos fiscales a las entidades financieras para que promuevan la dación en pago en sus contratos hipotecarios.

En este mismo sentido, para los casos en los que la dación en pago no se pueda utilizar, como por ejemplo en todos los contratos hipotecarios firmados hasta ahora, CiU ha propuesto incrementar el porcentaje de la deuda que se eliminaría con la subasta pública.

En estos momentos la ley prevé que un inmueble que sale a subasta pública y no encuentra comprador, pasaría a manos de la entidad financiera acreedora por el 50% del valor, lo que provoca que el otro 50% quede en forma de deuda para el cliente.

CiU propone que si se incrementa el porcentaje, es decir, que pasara a manos de la entidad financiera por el 60-70%, la deuda que mantendría el cliente sería mucho menor, 40-30%, con lo que el daño producido por el desahucio sería mucho menor.

Por otro lado también ha propuesto algo que ya ha decidido realizar el propio Gobierno, como es el incremento del mínimo inembargable, hasta ahora en los 633 euros, pero que pasará a una horquilla entre 950 y 1350 euros, dependiendo de la situación particular de cada caso.

En definitiva, en estos momentos de crisis acumulada, se echan de menos partidos políticos dispuestos a ayudar ofreciendo propuestas, más o menos acertadas, pero que, al menos otorgan un punto de partida para comenzar a reflexionar en pos de la mejor solución para todos.

Las vueltas que da la vida

Las vueltas que da la vida

Las vueltas que da la vida

Hay que ver las vueltas que da la vida en ésto del Euríbor y todo lo relacionado con el indicador de referencia hipotecario más utilizado. Si hace unos meses el fracaso del rescate de Grecia ponía nerviosos a los mercados y hacía subir el Euríbor de manera artificial, las buenas expectativas que se han creado tras la aprobación por parte del Parlamento heleno de los recortes económicos fijados por la Unión Europea ha estabilizado al Euríbor.

Así, el indicador cerrará junio por debajo del cierre del mes anterior, algo que no se veía desde el cierre de diciembre, ya que el Euríbor había encadenado cinco meses consecutivas de subidas intermensuales.

El cierre del Euríbor de junio quedará en el 2,143-2,145%, casi con toda seguridad, y aunque es un valor por debajo de mayo y el resultado de un proceso de estabilización general, aún así supondrá una importante subida en las hipotecas de todos los titulares que tengan que revisar sobre el Euríbor de junio.

Y es que el indicador cerró junio de 2010 en el 1,28%, lo que arrojaría un crecimiento de 0,8-0,9 puntos porcentuales, que se traducirían en un aumento en cuota de 80-90 euros mensuales, una cantidad significativa en cualquier momento, y más ahora con la tasa de desempleo todavía por las nubes.

Un incremento que se repetirá, sino se agudiza, en el mes de julio, ya que la subida de tipos de interés en la zona Euro en la próxima reunión del Banco Central Europeo parece ineludible, lo cuál hará crecer al Euríbor, por mucho que la situación griega siga estable.

Por ello, los hipotecados no pueden mantenerse tranquilos y deberán seguir apretándose el cinturón durante unos meses, tratando de abonar sus cuotas hipotecarias a pesar de las dificultades del mercado laboral actual.

La estabilidad de los mercados financieros, eso sí, es fundamental para que el Euríbor no se dispare de manera exponencial y mantenga un crecimiento sostenido, sin cambios bruscos que puedan acabar por hundir el presupuesto mensual de una familia.

Sorprende, eso sí, que Grecia, causante del vértigo de los mercados hace unos meses, ahora esté ayudando a su estabilización definitiva, las vueltas que da la vida.

Las hipotecas siguen de mal en peor

El pozo sin fondo de las hipotecas

El pozo sin fondo de las hipotecas

Cada nuevo dato que recibimos es un nuevo golpe a la maltrecha salud del sector hipotecario español que lejos de iniciar la senda de la recuperación parece que se ha metido de lleno en un pozo sin fondo a raíz del fin de la universalización de la desgravación fiscal por compra de vivienda.

Así, si en los meses de enero, febrero y marzo ya habíamos asistido a caídas en el volumen de hipotecas constituidas, el mes de abril ha ahondado en la herida, duplicando la caída de marzo y retrotrayéndonos a caídas que no veíamos desde mayo de 2009.

Concretamente, las hipotecas constituidas en abril cayeron un 38,2%, según los datos del Instituto Nacional de Estadística, mientras que el volumen del capital de esas hipotecas se desplomó un 42%, en parte por la caída de precios que han sufrido los inmuebles en estos últimos tiempos, y en gran parte, sin duda, al descenso de hipotecas constituidas.

En este mismo sentido, el importe medio de las hipotecas se ha desplomado hasta los 106.889 euros, algo más de un 6% menos que hace un año, con un tipo de interés medio del 4,04% y un plazo de amortización, también medio, de 22 años.

En cuanto al desglose por entidades financieras, las cajas de ahorros concentraron la mayoría de las hipotecas concedidas con el 49,2% del total, seguidas de cerca por los bancos, con el 37,5%, y quedando el restante 13,3% para las cooperativas y entidades de crédito.

Sin embargo, el ránking cambia cuando se habla del capital prestado en dichas hipotecas, ya que los bancos pasan a liderar con un 44% del total del dinero prestado en forma de hipotecas, mientras que las cajas se conforman con el 43,4%, dejando el resto 12,6% para las otras entidades financieras.

Sorprende que las cajas de ahorros sigan manteniendo estos buenos datos de concesión de hipotecas, a pesar del proceso de reestructuración tan profundo al que se están viendo sometidas, el cuál les está llevando a congelar la gran mayoría de sus operaciones financieras y de crédito.

En cualquier caso, estos datos del INE, junto a los del lunes del Ministerio de Fomento, certifican que sigue sin verse luz al final del túnel.

Los brotes verdes siguen marchitos

El sector financiero y el de la construcción siguen condenados a galeras

El sector financiero y el de la construcción siguen condenados a galeras

Según los datos que ha publicado la Asociación Hipotecaria Española (AHE), el saldo hipotecario en el mes de abril cayó en un 3,42% con respecto al mismo dato de abril de 2010, lo que supone quedarse en 1.056.000 millones de euros, 558.634 en manos de los bancos, 412.319 en manos de las cajas de ahorros, y el resto en manos de cooperativas de crédito y entidades de crédito y emisión de tarjetas.

Esta caída pone de manifiesto que el sector hipotecario español está muy lejos de recuperarse y que todavía sigue inmerso en un proceso de reestructuración que no parece tener fin, a juzgar por los datos que cada poco nos van ofreciendo los diferentes emisores de los mismos.

La reducción del saldo hipotecario puede tener muchas causas, pero rápidamente las encontramos en el hecho de que cada vez se concedan menos hipotecas, porque las entidades financieras, sin liquidez para ello, prefieren guardar el dinero a buen recaudo y no estropear, aún más, sus balances.

También es importante la caída de precios de la vivienda. Lógicamente, al haber bajado el precio de los inmuebles, las hipotecas se conforman por menos dinero, con lo que el saldo hipotecario es menor de lo que era antes, incluso teniendo el mismo número de hipotecas.

Y, por último, la caída del saldo hipotecario también está relacionado con los embargos hipotecarios, ya que cada vez que se produce un embargo se cancela la hipoteca, quedando una deuda pendiente por la diferencia entre el precio de venta del inmueble, en subasta pública (generalmente, el 50%) y la hipoteca no amortizada.

La única buena noticia con la que se ha encontrado el sector, por otro lado, es el buen comportamiento de la tasa de morosidad de los préstamos hipotecarios, que con un fantástico 2,42% se encuentra muy por debajo de la tasa de morosidad del resto de préstamos, rozando el 6,5%.

En definitiva, el sector hipotecario en su conjunto, englobando al sector de la construcción y al sector financiero, está muy lejos de iniciar una recuperación real, y sigue condenado a galeras a remar, hasta que el crédito se consiga normalizar gracias a la liquidez de las entidades financieras.

Medida sustitutiva de la dación en pago

Cómo para volverse uno loco

Cómo para volverse uno loco

Las asociaciones de hipotecados están iniciando una campaña para promover alternativas sustitutivas de la dación en pago, ante la constante negativa de la clase política a implementar la dación en pago como método resolutorio en casos de embargo hipotecario.

Y la medida que más adeptos está ganando en las últimas semanas es la del alquiler como sustituto del embargo hipotecario, de manera que los titulares hipotecarios incapaces de pagar sus cuotas mensuales se quedarían a vivir en las viviendas de su propiedad, que ahora sería del banco o caja, a cambio de un alquiler.

La ventaja es que el alquiler sería más bajo que la cuota hipotecaria, con lo que sí podrían hacer frente a su pago, y que se evitaría el drama social del desahucio, ya que la familia no tendría que desplazarse a otro domicilio, manteniendo su arraigo y sus pertenencias.

Por otro lado, con esta medida las entidades financieras consiguen obtener un ingreso de un pasivo que tienen paralizado, con lo que el daño que las viviendas embargadas estaban produciendo en sus balances se reduciría de manera drástica, aliviando algo su carga financiera.

Uno de los puntos de mayor polémica estaría en la obligación de compra del contrato de alquiler, es decir, estipularía que los inquilinos estarían en obligación de adquirir la vivienda en la que están viviendo una vez que sus condiciones económicas mejoraran y estuvieran en condiciones de hacerlo, eso sí, con una hipoteca de la propia entidad financiera.

La polémica radica en la determinación del momento en el que la familia pueda estar en situación de recomprar la vivienda de la entidad financiera por la mejoría de su situación económica, ya que habría que determinar con exactitud el momento y las condiciones para ello.

En cualquier caso, esta propuesta es un excelente punto de partida para construir una solución a un problema que se está enquistando en nuestra sociedad, sin que ni políticos ni agentes económicos estén siendo capaces de encontrarle solución, más preocupados, como están por mantener sus puestos de responsabilidad al precio que sea y pasando por encima de quien tengan que pasar en cada momento determinado.

El BCE sigue a lo suyo

No hay más ciego que quien no quiere ver

No hay más ciego que quien no quiere ver

El Banco Central Europeo parece que no se entera, o no se quiere enterar, de la grave crisis de crecimiento económico que sigue sufriendo la economía de la zona Euro, y sigue empeñado en priorizar, por encima de todas las cosas, el control de la inflación.

No te voy a decir que esté mal, porque la inflación debe de ser controlada, pero ahora bien, de poco sirve controlar una variable cuando la economía está muerta. Lo primero que hay que hacer es reanimar a la economía y luego ya controlar sus constantes vitales.

Y digo esto porque en su reunión del pasado jueves, el Banco Central Europeo decidió mantener sus tipos para el mes de junio, como se esperaba, pero insinuó una posible subida de tipos de interés para el mes de julio, con lo que el precio oficial del dinero dentro de la zona Euro pasaría del 1,25% al 1,50%.

¿Qué efectos inmediatos tendrá este anuncio?

Si no de manera inmediata, durante este mes de junio el Euríbor comenzará a moverse al alza, para anticipar esta expectativa de subida del mes de julio, con lo que todas las personas que utilicen el Euríbor de junio para revisar su hipoteca lo harán claramente al alza, con un incremento de cerca del punto porcentual, lo que significará casi 90 euros de más en su cuota hipotecaria mensual.

Por otro lado, el crédito, en general, se encarecerá, con lo que las empresas, que ya tienen problemas para acceder a financiación, sufrirán aún más para conseguirlo, y si lo hacen tendrá que ser a precios más caros.

Por tanto, se producirá un enfriamiento de la economía, cuando todavía no habíamos ni empezado a calentarnos, perpetuando, así, la situación de crisis económica en la que nos estamos moviendo desde hace ya demasiado tiempo.

Y ese no es el mayor problema, porque todo apunta a que antes de final de año tendremos alguna subida adicional. Los analistas siguen afirmando que el tipo de interés para la zona Euro terminará el año en valores entre el 1,75% y el 2%, por lo que, aparte de la de julio, debería de haber, al menos, una subida más.

Las ventas de viviendas se hunden en el primer trimestre

Seguimos de mal en peor

Seguimos de mal en peor

Cuando el Gobierno anunció la eliminación de la universalidad de la desgravación fiscal por compra de vivienda, todos intuimos que produciría un efecto adelantamiento de la compra que, efectivamente, se ha producido si nos atenemos a las cifras que conocimos ayer.

Y es que el Ministerio de Fomento publicó los datos relativos a las ventas de viviendas durante el primer trimestre del año 2011, y éstas son claramente esclarecedoras. La caída del 30,4% con respecto al primer trimestre de 2010 pone bien a las claras que muchos compradores se decantaron por adquirir su vivienda en los últimos meses del año pasado, y aprovecharse así de la desgravación fiscal.

De hecho, si se repasan bien las cifras, se comprueba que la mayor caída se produce en el mes de enero, para recuperarse ligeramente en los meses de febrero y marzo, acercándose a los valores del tercer trimestre de 2010, lo que da a entender que la caída se debe a la acción del Gobierno.

Bien es cierto, sin embargo, que hasta que no conozcamos los datos del segundo y tercer trimestre no podremos afirmar que toda la culpa fue de la eliminación de la desgravación fiscal para todos, aunque todo apunta hacia ello.

Pero, retomando los datos, hay que reseñar que el número total de operaciones fue de 74.540, de las cuáles el 64,8% fueron sobre vivienda usada, quedando el resto 35,20% para vivienda nueva, con lo que se demuestra que la vivienda usada ha ajustado mejor el precio, en parte por la necesidad imperiosa de los vendedores.

Y es que el precio de una vivienda viene determinado por las circunstancias del mercado, pero también por la necesidad de comprador y vendedor, de forma que si un vendedor necesita vender su vivienda de manera urgente lo hará al precio que sea, y, de igual forma, si un comprador se encapricha de una vivienda no le importará pagar un poco más por ella.

En definitiva, seguimos hundidos en el pozo en el sector inmobiliario español, con una falta de dinamismo alarmante y una ausencia, casi absoluta, de perspectivas de recuperación en el corto-medio plazo, a no ser que los bancos quieran abrir el grifo del crédito en los próximos meses.

Constructores vs. Bancos

Balones fuera que es la crisis

Balones fuera que es la crisis

El Salón Inmobiliario SIMA 2011, que ha tenido lugar este pasado fin semana se inició con la queja de los constructores sobre la falta de crédito que recibía el sector, y ha terminado con esa misma queja, basada en la ausencia casi absoluta de préstamos hipotecarios dirigidos al sector de la construcción.

Y es que los bancos, y entidades financieras en general, han decidido que no están por la labor de arriesgar su dinero en un producto de alto riesgo, como es en estos momentos la promoción inmobiliaria, con la única garantía de una bien inmueble, del que ya andan sobrados en sus balances y que no tiene ninguna salida en estos momentos de crisis.

Ello hace que no se estén llevando a cabo proyectos inmobiliarios, según los constructores y promotores, y está haciendo que éstos acumulen suelo urbanizable que acabará por estallar en otra burbuja inmobiliaria en unos años cuando empiecen a recuperar el crédito.

Por otro lado, los promotores y constructores también han salido de SIMA 2011 reclamando una mayor agilidad de las administraciones públicas que están tardando entre 8 y 9 meses en facilitar las licencias necesarias para iniciar una obra de construcción, tiempo excesivo que alarga los plazos y, evidentemente, encarece los proyectos de manera artificial.

También hay una queja generalizada por la divergencia entre las diferentes estadísticas sobre el sector, que lleva a confundir a los inversores y a los posibles compradores, que no saben si hacerlo ahora o dentro de uno tiempo. Para ello, los promotores y constructores también han solicitado a todos los agentes involucrados que se abstengan de realizar afirmaciones sobre el posible ajuste del precio de la vivienda, ya que ello provoca el postergamiento de la decisión de compra.

En definitiva, los constructores y promotores han salido del Salón Inmobiliario SIMA echando balones fuera, sin tomar la responsabilidad que tienen en su propio apalancamiento como consecuencia de los excesos del pasado, que sí, que parte de la culpa fue de las entidades financieras, pero también fue suya, por moverse en las farragosas aguas del todo vale, y de la búsqueda del beneficio sin paliativos.

El Euríbor certifica su estabilización

El balancín del Euríbor

El balancín del Euríbor

El Euríbor ha cerrado el mes de mayo en el 2,147%, en tasa media mensual, lo que supone un incremento de 0,898 puntos porcentuales con respecto al cierre de mayo de 2010, pero de apenas 0,06 puntos porcentuales con respecto al cierre del mes pasado, de abril de 2011.

Por ello, se certifica la estabilización del indicador, después de que durante los meses de marzo y abril se introdujera en una vorágine alcista que no parecía tener fin y que hizo que algunos analistas comenzaran a hablar del 3% a finales de año como una previsión realista y no como el máximo casi inalcanzable.

En cualquier caso, y comparado con el Euríbor de hace un año, la comparación realmente importante, lo cierto es que el incremento de casi 0,9 puntos porcentuales arrojará un incremento en cuota hipotecaria mensual cercana a los 80 euros, para una hipoteca media, una cantidad elevada, sobre todo, si tenemos en cuenta la crisis económica que nos sigue golpeando.

Un incremento que pende de un hilo, del hilo que maneja el Banco Central Europeo, que en su reunión de junio puede insinuar futuros incrementos del tipo de interés para la zona Euro, tal vez después del verano, lo que supondrá expectativas que recogerá el Euríbor, creciendo durante los meses previos al incremento efectivo del tipo de interés.

Y es que los analistas económicos hablan de un tipo de interés entre el 1,75% y el 2% antes de finales de año, lo que obligará a subidas por parte del Banco Central Europeo, con el objetivo de controlar las tensiones inflacionistas que se siguen dando, y de las que es tan temeroso el máximo organismo de supervisión financiera europea.

Por tanto, es posible que los próximos meses sigamos en esta tendencia alcista, sobre todo en comparación con las cifras de 2010, lo que hará que todas las personas que tengan que revisar sus hipotecas durante este año lo hagan al alza, teniendo que pagar más dinero por sus cuotas hipotecarias mes a mes.

Cuotas hipotecarias más elevadas, que se añaden a falta de empleo y a expectativas económicas inciertas e inestables para el futuro, lo cuál no ayudará, de ninguna forma, a la estabilización del país.