Es muy cierto que el crédito al consumo se mantiene como uno de los pilares en la actualidad de la banca, misma que se encuentra sumergida en la búsqueda de rentabilidad en algunos de los escenarios de tipos mínimos e incluso negativos.
El crecimiento de este factor se ha producido a tal velocidad que incluso los supervisores y los reguladores han llegado advertir a las entidades sobre un repunte de la morosidad. Esto significa que, de ser así, las consecuencias podrían llegar hacer incluso más que sólo la posibilidad de incremento de morosidad.
Esto es lo que incluye algunas de las indicaciones que Moody’s ha realizado dentro de su análisis publicado recientemente en el cual asegura que hay una ralentización en la economía de España y por tal motivo hay una pérdida de confianza por parte de los consumidores que puede llegar a elevar los riesgos para los prestatarios, es decir, que los consumidores no puedan afrontar el pago de los préstamos de manera oportuna.
Grandes problemas a la industria del crédito al consumo.
Antonio Tena, el vicepresidente así como el analista de la agencia de calificación Moody’s, expresó que a la calificadora le gustaría y esperaría que los prestatarios se enfrenten muchos más desafíos para poder pagar aquellos préstamos de consumo.
Las entidades bancarias han comenzado acelerar la concesión de este tipo de préstamos para así contrarrestar aquellos efectos dentro de la política monetaria del BCE, que por su parte lastra sus cuentas dentro de los últimos ejercicios.
Por su parte, los consumidores, han comenzado a elevar su demanda de este tipo de productos financieros luego de la recuperación tras la crisis financiera que se vivió en el año 2008. No obstante, aquellos signos de ralentización que se han visto ya en los últimos meses a logra dominar en gran parte la confianza que se depositaba en la economía de España así como en el empleo y otros factores determinantes para su economía y crecimiento.
A pesar de esto, la agencia calificadora realiza ciertos matices en los cuales expresa que no serán iguales los efectos para todos los préstamos al consumo, esto se debe a que aquellos préstamos destinados a la compra de automóviles tendrán un comportamiento mucho mejor que otros. Esto también podría deberse a la mayor calidad de esos prestatarios.
Por otro lado aquellos préstamos que están destinados a un consumo sin una finalidad específica, son utilizados de manera frecuente por aquellos deudores con dificultades económicas, por lo cual serán algunos de los más afectados.
La expectativa de este calificadora es que la economía de España habrá de crecer un 1,8 % en el año 2020, esto en contraste al 3 % de media que logró avanzar en los años 2016 y 2017 respectivamente.
Otra de las prevenciones que efectúa el Servicio de Estudios Mapfre es que, en el año 2020 se acentuará la desaceleración en la economía de España por lo cual hay que estar preparados ante estas adversidades financieras que afectarán los bolsillos de la población.