Podemos saber mucho sobre diversos temas.
Estoy seguro de que conoces tu área laboral a la perfección. Lees, recibes artículos al respecto de temas que te interesen y te mantienes al día en las últimas noticias.
Pero, ¿alguien te ha explicado algo sobre bienes raíces? ¿Conoces el mercado inmobiliario?
La respuesta común es no, o tal vez sólo un poco. En la escuela no aprendemos de sobre eso precisamente, y es en verdad un tema que a todos nos compete.
Por eso, en este artículo te diremos qué términos inmobiliarios son los que debes conocer y cómo puedes usarlos a tu favor para que realices la mejor inversión posible.
Todo lo que necesitas para tramitar tu hipoteca
Uno de los conceptos principales que debes conocer antes de tramitar es tu capacidad de endeudamiento. Esta cantidad será la que responda a la pregunta: ¿Qué tanto puedes pagar sin quedarte en bancarrota? Este número será el tope de lo que pagarás en cuanto a tu hipoteca.
Para calcularla, debes calcular el 30% de tus ingresos mensuales. De esta forma la cantidad máxima permitirá que te encargues de tus necesidades básicas y de otras deudas previas que puedas llegar a tener.
Otro término interesante, y que puede resultar sumamente beneficioso son las bonificaciones. Las bonificaciones son rebajar ciertos índices en la hipoteca si se contratan ciertos productos por parte del banco. Puede reducir mucho la deuda, además de dotarte de un buen historial de crédito.
Un índice de utilización constante en el mercado inmobiliario es el IRPH (Índice de Referencia de Préstamos Hipotecarios). Este índice representa el promedio de los préstamos hipotecarios que se han concedido a un mismo cliente. Si el cliente presenta préstamos con intereses altos, este índice también aumentará.
Vuélvete un conocedor del mercado inmobiliario
Existen términos que son referencias de tiempo en relación con los pagos. Uno de ellos es la carencia, en donde el pago que realiza en cliente es el interés y no la amortización. Permite que el cliente que pase por momentos económicos difíciles poco a poco se recupere.
También está la clausula de vencimiento anticipado, en donde la empresa puede protegerse y el contrato de hipoteca sea finalizado o invalidado debido al impago de ciertas mensualidades. Es una manera segura de proteger los bienes empresariales.
Ligado al concepto anterior, existe también la comisión de amortización anticipada. Es una cantidad que el banco o la entidad financiera escogen cobrar al cliente, en caso de que el contrato sea finalizado prematuramente.
Obtén tu hipoteca, sin perderte en el intento
Un término que no siempre se utiliza, pero puede que en algunos casos sea importante conocer: la clausula de subrogación. Dicha cláusula, dependiendo de la entidad financiera en cuestión especificara las condiciones por las cuales el deudor o acreedor deban ser cambiados.
En caso de ciertas empresas, esta clausula traspasa ciertos casos a otra entidad financiera. Todo dependerá de los lineamientos de la empresa. Espero que este artículo haya sido de tu agrado y pronto vuelvas a leernos.