Son varios los motivos que nos lleven a contratar un seguro de hogar, puede que seas precavido y quieras evitar cualquier inconveniente futuro o puede que hayas tenido algún incidente y las pérdidas te lleven a esta decisión. En un contrato de seguro de hogar estará el valor real y el valor nuevo de la pérdida.
Sabemos que los hurtos son los principales impulsos que llevan a la contratación de un seguro de hogar, porque suelen llevarse cosas de valor y porque suelen hacer daños que también nos costarían dinero. Pero no solo un hurto sería motivo para contratar un seguro de hogar. También son útiles ante daños que agentes externos nos pueden ocasionar, como edificios colindantes con nos provoquen goteras o desprendimientos, etc.
Por lo que es fundamental, al momento de la contratación de un seguro de hogar, que comprendamos de forma correcta los términos y condiciones determinados. Sobre todo lo que refiere a la indemnización a percibir ante cualquier siniestro de nuestros bienes. El valor nuevo y el valor real.
Valor nuevo: la entidad se compromete a reemplazar el bien a indemnizar, con las mismas características que tenía. Por lo que debería darnos el valor del mismo para poder comprarlo nuevo al momento del siniestro.
Valor real: aquí el valor real es lo que el bien valía en el momento anterior al siniestro. Esto dependerá de su antigüedad, su uso y su deterioro. En cuanto a piezas de arte se evaluará el valor en el mercado al momento del siniestro.