A raíz del atropellado proceso para la reforma de nuestra Constitución, he escuchado estos días montones de voces alzándose en un clamor de queja sobre la destrucción de los servicios sociales, la pérdida de la soberanía popular y la puñalada por la espalda al Estado de derecho ay a los derechos de los más desfavorecidos.
En parte estoy de acuerdo con estas voces, sobre todo cuando se quejan de que la reforma se ha hecho mal y con prisas, y que el mes de agosto no es momento para estas urgencias, y menos a tan solo tres meses de las elecciones.
Lo que ya no entiendo es lo del ataque a los derechos sociales, el cabreo de la izquierda y todas las protestas contra el recorte del déficit. De hecho, leyendo y escuchando muchas de estas opiniones me quedo con la duda de si la gente sabe lo que es el déficit.
Porque el déficit no es le gasto. Se puede y se debe seguir gastando en servicios sociales, en educación en sanidad y en cobertura al desempleo. Se tienen que seguir implementando políticas de redistribución, etc. Pero todo eso es gasto. El déficit, simple y llanamente, es gastar más de lo que se ingresa, y eso se tiene que cortar de algún modo porque no se puede gastar más de lo que se ingresa de manera indefinida.
Los que se oponen a que se regule el déficit se oponen a que se obligue a cuadrar alguna vez las cuentas. Porque lo que el nuevo artículo dice es que puede haber déficit algunas veces, pero no siempre. No eternamente. O sea, que el nuevo artículo dice lo que diría nuestra abuela, más o menos.
Si no hacíamos algo así, las hipotecas seguirían descendiendo en nñumero y cantidad prestada, el Estado acapararía cada vez más parte del flujo monetario y los políticos de hoy seguirían gastando a manos llenas los impuestos del futuro, porque el déficit, a ver si caemos en ello, es eso: gastarse hoy los impuestos del futuro.
¿Y algo más antidemocrático que dejar a los votantes futuros sin capacidad de decisión?
Ladrilez la gente no tiene n.p.i de qué significa déficit y no sólo no la tiene si no que le da igual.
Lo gordo no es eso, lo gordo es que los que hablan de “no recortar derechos sociales” y seguir gastando más de lo que ingresamos, en el fondo lo que están pidiendo es que “nos gastemos ahora lo que generarán las generaciones futuras y les dejemos a ellos la factura”, o sea, que en el fondo “que no recortemos los derechos sociales de estas generaciones y que le den por ahí a los las generaciones que vienen”. Además lo defienden fehacientemente, en lo que resulta un ejercicio de incoherencia magnificada a niveles estratosfericos.
No te extrañes. Dabeman. La mayoría son gente sin hijos… 🙂
Yo creo que la mayoria ni se ha planteao eso de las generaciones futuras, cuanto mas lo que significa la palabra deficit.
La gente solo se queda con lo q les interesa de lo q ponen en los medios, y los medios solo ponen lo q les interesa, asi q……
Lolo, si la gente no se entera, la democracia es un sistema nocivo…
Cuanta razón!
Pues en este pais yo creo que es asi. Tenemos una poblacion amuermada, muy sugestionable y que actua por impulsos.
Aqui la democracia es eso que se pone en practica cada 4 años, cuando los politicos te dicen que el soberano es el pueblo y que ellos estan a tu disposicion. Ahora, pa cosas realmente importantes como una reforma constitucional, se ve lo soberano que es el pueblo, que no lo han tenido en cuenta y han procurao hacerlo en vacaciones, pa quitarle hierro al asunto.
Y lo peor de to es, desde mi punto de vista, q es lo mejor q han hecho, no contar con el pueblo. De lo contrario no hubiera sido aprobado nunca: “hombre como vamos a votar pa q el ayuntamiento no haga obras en el pueblo ni me de ayudas (mientras yo recibo bajo manta)”