Nos podemos devanar los sesos buscando tres pies al gato, pero al final lo que le importa a una persona que está pagando una hipoteca es la cuota que debe de ir pagando mes a mes, porque es la que determinará su situación financiera al final de cada 30 días.
Por ello, me ha llamado la atención un buen artículo que he leído en Invertia.com, en el que se dan ocho consejos para rebajar la cuota de la hipoteca, y los voy a compartir contigo, matizando las cuestiones importante:
1. Ampliar plazo: Esta es una buena opción siempre que negocies comisión de cancelación parcial al 0%. Al ampliar plazo pagas más intereses, pero consigues una cuota más baja. Teniendo la amortización parcial gratuita puedes ir rebajando los plazos sin períodos fijados, a medida que vayas acumulando capital.
2. Período de carencia: Esta medida no la suelo recomendar. Se basa en que durante ese período dejas de pagar capital y sólo pagas intereses, con lo que la cuota, evidentemente, se reduce, pero no amortizas nada de lo que debes. Creo que es una medida sólo interesante para situaciones de emergencia plena.
3. Capital diferido: Esta práctica consiste en dejar una parte del capital (normalmente hasta el 30%) para la cuota final, con lo que la cuota mensual se calcula sólo sobre el 70% del capital. No todos los bancos aceptan esta acción, así que depende de la entidad.
4. Negociar tipo de interés: Para ello es necesario tener cierto poder de negociación, es decir, estar en una situación buena con el banco, el no deber nada, el tener muchos productos contratados. Aún así, en estos momentos los bancos no están por la labor, así que no es muy efectiva.
5. Ofertas vinculantes de otros bancos: Se trata de obtener una oferta mejor de otro banco por escrito y utilizarla a la hora de negociar. Más efectiva antes de contratar la hipoteca, aunque también puede servir para el caso anterior, para poder negociar el tipo de interés dese una posición de poder de negociación.
6. Amago de subrogación: Esta práctica es muy habitual en la telefonía móvil. Se trata de solicitar una subrogación, con lo que tu entidad estará más por la labor de negociar. Es una especie de chantaje al banco, que si quiere retener tu hipoteca con ellos te ofrecerá condiciones más interesantes.
7. Aplazamiento de cuota: Algunos bancos la aceptan, pero en general no suele ser de su agrado. Se trata de saltarse alguna cuota, es decir, pagar 11 cuotas al año, por ejemplo, con lo que el cómputo general se reduce.
8. Subrogación: Si ya hemos intentado todas las opciones con nuestra entidad habitual, ya sólo nos queda la opción de la subrogación a un producto hipotecario más competitivo, en el que podamos obtener una cuota mensual inferior.
En definitiva, ocho opciones, unas mejores que otras, que nos pueden ayudar a rebajar la cuota mensual que pagamos a nuestro banco. Repásalas todas y utiliza la que mejor se ajuste a tu perfil y a tu situación.
Lo de ampliar plazo me parece bien siempre y cuando no quede otro remedio, pero da mucha rabia pensar que durante años y años lo único que estás pagando son intereses. Prefiero apretarme un poco el cinturón durante 15 años que pasarme 40 pagando hipoteca.
No hay que pensar en eso. Es mejor pensar que ahora necesitas un respiro porque vas muy apretado y confiar en que en el futuro, la moneda o un mejor nivel adquisitivo te ayude a pagar de una tacada todo lo que debes.
Pienso lo mismo, Ximo. Cuando no hay otro remedio hay que tirar de las pocas opciones que tengas y gracias que las tienes. A mi padre no le quedó otra que ampliar el plazo de la hipoteca y podría ser que al final seamos los hijos los que sigamos pagando para no quedarnos sin vivienda. Quién sabe, igual tenemos un golpe de suerte, pero por ahora tenemos la vivienda, que menos es nada.
en una situacion donde tengas los recursos para sufragara el adeudo siempre se buscaran cortos plazos , a nadie la agrada la idea de estar pagando mes tras mes durante decadas un bien , por eso ampliar plazos si seria en caso de que no haya otra solucion.
Pues depende. Yo creo que mucha gente prefiere sentirme más libre y menos agobiada aunque a la larga pueda significar más dinero. Porque hay veces en la que el cinturón aprieta demasiado y 1 mes, 2 ó 3 vale, pero siempre puede convertirse en una pesadilla y no disfrutas ni la vida.
Yo conozco varias personas que han intentado negociar el tipo de interés con su banco sin resultado alguno. Como mucho, puedes negociar algo respecto a algún producto contratado, como las cuotas anuales de las tarjetas, y a veces ni eso. A lo mejor es que estoy rodeado de gente con poco poder de negociación o de convicción, vete tú a saber.
las entidades bancarias no ceden pues al ser una institucion se rige por una serie de normas que tienen efecto en sus integrantes y en aquellos que utilizan el servicio , por tanto no se les enseña a identificarse con las necesidades de los usuarios sino que solo hacen lo necesario para cumplir la mision de la organizacion y eso es acrecentar las ganancias.
Nunca he probado lo que denominas “amago de subrogación” con el banco, pero en telefonía móvil funciona de las mil maravillas. Sólo tienes que decir que te vas a otra para que te ofrezcan condiciones ventajosas y entonces se te queda cara de tonto, pensando en los meses que te han tomado el pelo por tener la boca cerrada.
claro porque existe mayor competividad en la telefonia celula y se pueden ofrecer mejores paquetes al consumidor , en el caso de entidades bancarias al hablar de creditos hipotecarios estan en juego montos dinerarios muy altos que la empresa no esta dispuesta a ceder , pues ellos se enfocan en dar creditos tal como lo establecen previamente ,dentro de sus funciones no esta el negociar.
Yo lo he hecho varias veces, y en ocasiones me ha funcionado y otras no. Se supone que te lo rebajan porque estás pasando una mala racha económica y te lo conceden durante unos meses, aunque luego te lo pueden volver a subir. Si ven que igual les estás tomando el pelo llamándoles cada 2×3 con la misma cantinela puede que no cedan, aunque yo animo siempre a intentarlo.
Yo al principio era muy conservador también. No me molestaba en negociar un ápice y pensaba que las ofertas que les hacían a mis conocidos eran fantasmadas. Sin embargo, en un momento de ira con mi compañía de móvil hice una portación y me enganché. Cambié la compañía de luz, gas, teléfono… Se aprovechan de nuestra pasividad.
Es una costumbre muy arraigada en nuestra sociedad el aceptar las condiciones que nos vienen dadas. Las décadas de monopolio en todos los sectores económicos de nuestro estado han favorecido estas actitudes. Y el dicho de “más vale malo conocido que bueno por conocer” tampoco ha ayudado mucho para cambiarlo…
El problema es que la libre competencia no es tan libre como aseguran. Especialmente en el caso del sector financiero, que está controlado por unas pocas manos. Y el futuro, con tanta fusión y absorción, tampoco es que sea muy esperanzador.
La verdad es que sí, Señor Romero, que se aprovechan de nuestra debilidad y yo diría también que de nuestra vagancia. Porque hay que ser vago –y también me lo llamo a mí mismo- para no comparar las ventajas de una compañía u otra y después quejarse cuando nos llega un recibo astronómico.
Yo intenté que me redujeran el diferencial, pero el banco pasaba de mí, así que empezé a moverme y cuando le pides al banco el detalle de tu hipoteca con saldo pendiente, vamos, lo que te pide el banco al que te vas a subrogar es cuando te toman en serio y lo miran de verdad. Yo me iba a cambiar y al final me redujeron el diferencial del 1% al 0,70%, haciendo números me salía mejor quedarme.
Con lo cual, recomiendo que se pida directamente a tu banco dicha información porque entonces sí que si realmente pueden miran tu caso, hablar con ellos simplemente, es perder el tiempo.
uno usa estos mecanismos con el objetivo de que le favorezcan pero no se tiene el poder de influir en las decisiones bancarias para que ellos puedan ser condescendientes con los usuarios , el Estado podria ser el unico interventor para regular a las instituciones bancarias.
Los bancos no son tontos y se las saben todas. Saben que puede ser un farol, y hasta que no te pones serios con ellos no ceden. Me alegro que tu presión e iniciativa hayan dado resultado. Y es que como se suele decir: “el que no llora, no mama”.
Me alegra ver que la presión da resultado, Marta. Y es que cuando nos tocan las cosas de comer… ya se sabe. En mi caso no tengo hipoteca, pero sí estaba muy enfadada por las comisiones sin sentido de mi banco, así que un día me planté allí toda indignada y vaya si me hicieron caso. A veces no queda otra que sacar carácter.
no todos corren con la misma suerte pues dentro de la entidad bancaria reinan politicas establecidas por el cuerpo burocratico y no son flexibles , se busca la ayuda del Estado y este no te la proporciona entonces uno queda a expensas de la voluntad de las organizaciones bancarias.
Como ya he comentado en otras ocasiones, creo que existe una alternativa distinta para prestamos nuevos que reduce notablemente las cuotas sin necesidad de acumular importes al final de la vida del préstamo.
Os animo a leer la idea en la siguiente dirección:
http://www.euribor.com.es/2009/05/19/prestamo-solidario-productos-financieros-para-la-crisis/
En resumen…, la idea consiste básicamente en que el vendedor accede al aplazamiento de parte del dinero que le corresponde, haciéndose partícipe en el préstamo, de forma que se reducen los intereses totales a pagar durante el periodo de amortización… de alguna manera le da un crédito al banco que al final paga el comprador, claro está.
Ahora sólo hace falta que el Banco de España lea esto y autorice este tipo de préstamos….;D
Estoy haciendo un excel pero no sé como colgarlo.
He leído el artículo del préstamo a tres bandas y creo que al final la parte que se queda más en desventaja es el vendedor. Me explico, en general, con tu primera vivienda, vendes para comprar otra, normalmente necesitas todo el dinero, pero pongamos que puedes prescindir de un % para establecer esa nueva modalidad… El quid son las garantías que tendría el vendedor para asegurar su cobro tiempo después, qué tipo de instrumento se utiliza para asegurar ese cobro? cual es su coste?… Si al final no se recibe ese dinero, ¿el piso vuelve a su propietario original en proporción a lo no pagado? en resumen, si el comprador no paga lo pactado porque no tiene dinero… ¿qué pasa?
el comprador hara lo mismo de siempre pero beneficiandose de la rebaja.
el banco seguirá siendo el acreedor de la vivienda en caso de impago.
y el vendedor tiene la garantia del banco de que va a cobrar, porque, el dinero del vendedor lo tiene el banco retenido y lo va soltando en función de lo pactado. es como si el vendedor le diera un credito al banco.
todas estas opciones seran utilizadas por la incapacidad de pago , es interesante conocerla y muy util ya que en momentos de contraccion economica te llegan a sacar de apuros y asi no pierdes el bien inmueble que adquiriste a traves del credito.
Yo la verdad es que no la he necesitado, pero sé de gente que ha echado mano de la unificación de deudas y se ha quedado satisfecha. Parece una forma válida de quitarse de encima “trajineo” y disponer de más dinero al llegar a fin de mes, aunque a la larga lógicamente haya que pagar más.
Mi familia ha tenido que hacerlo, Carmelo, o nos quedábamos en la calle. Ahora mi madre ha encontrado un trabajo y estamos un poco menos ahogados, pero si no hubieran recurrido a la financiera no sé qué hubiera pasado porque tampoco los hijos tenemos una situación maravillosa.