Como casi todo, estas cosas son según se miren...
A la hora de comprar una vivienda hay que pensar en todas las posibles opciones y una de ellas, y muy buena, son las cooperativas de vivienda.
Una cooperativa de viviendas es una asociación mercantil que, al coincidir en sus fines e intereses, desarrollan una actividad económica, considerándose socios o partícipes todos sus miembros, de modo que reparten entre ellos el rendimiento de la cooperativa.
La principal ventaja de la cooperativa es que, al ser los propios compradores de los pisos los que promueven la edificación, se ahorran el margen del constructor lo que puede suponer un veinte o hasta un treinta por ciento del precio final de la vivienda.
Las cooperativas pueden edificar y parcelar por sí mismas o encargar este servicio, y los que hagan falta, a terceras empresas. Lo normal es que la cooperativa de vivienda ejerza de promotora, pero no de constructora, ya que esta última no es una simple actividad de intermediación financiera. O sea, que comprar y vender puede saber hacerlo, más o menos, cualquiera, pero poner vigas y ladrillos, no tanto.
La casuística de las cooperativas de viviendas es demasiado amplia para abordarla en este espacio, pero me gustaría decir unas pocas cosas, aunque sea de manera esquemática:
-Que es importante exigir avales por todas las cantidades aportadas, no vaya a ser que alguien se marche con la pasta o se pierda lo aportado si algo va mal. Siempre puede pasar, porque meternos en una cooperativa nos convierte en empresarios que asumen riesgos, pero esta precaución es fundamental.
-Que a menudo existe un periodo de tiempo en el que si se quiere vender la casa hay que ofrecerla obligatoriamente a la cooperativa en primer lugar (retracto), y que si esta no desea comprarla, y sólo en ese caso, se puede vender en el mercado libre.
-Que habitualmente se ahorra mucho dinero en la compra der la vivienda, pero mi experiencia me dice que lo que ahorras en la casa te lo gastas en aspirinas, porque las cooperativas de viviendas funcionan de modo parecido a las comunidades de vecinos y no imagináis los problemas peregrinos que la gente llega a plantear durante la construcción.
-Que por diversas razones los plazos suelen extenderse y extenderse, y como los promotores somos nosotros mismos no hay a quien reclamar, como no sea al Maestro Armero. (Recibe de 5 a 7 en la armería municipal…)
-Que los bancos son a veces reacios a prestar dinero para las aportaciones, pero como estas no suelen ser muy grandes el problema no es grande. De todos modos, no conviene despreciarlo, porque mientras dura la construcción, y la cosa se alarga, hay que pagar las aportaciones y vivir en algún lado.
Por último, quisiera señalar, en resumen, que las cooperativas de vivienda son una buena opción por el ahorro que implican, pero si el terreno está bien situado es muy raro conseguir hacerse partícipe en una de ellas como no sea a través de un grupo o asociación con poder de negociación (evito cuidadosamente, como veis, la palabra mafia) y que si es fácil entrar es muy probable que el terreno esté en el quinto carajo.
O sea, que lo habitual: si es bueno es para los de siempre, y si no es para los de siempre, desconfía.
Las cooperativas de vivendas, en principio, son una idea estupenda y una buena solución para comprarse una casa por un precio decente. El problema es el habitual: cuando hay una buena idea que puede servir al interés de unos cuantos, a veces surgen uno o dos más “listos” (o con menos escrúpulos) que intentan aprovecharse de la buena fe del resto. Y si no, que se lo digan a los de la PSV.
Afortunadamente en muchas ocasiones esto no ha pasado, y si bien hasta que las casas se han terminado los cooperativistas han estado pagando y aguantando, al final muchos consiguieron buenos pisos a un precio más que decente. Yo conozco a algunos.
Si recuerdas la PSV te azotarán en público.
Avisado estás.
Siempre ha de existir el oportunismo por parte de algunas personas , dejandose llevar por el apetito de sus pasiones , deforman una buena estrategia poniendo en riesgo el exito de esta ; por tanto la toma de decision de entrar a una cooperartva no ha de ser con liviandad , sino con una plena conciencia de los riesgos que implica.
Lo cierto es que las cooperativas de viviendas están desprestigiadas desde el escándalo de la PSV, y mira que fue hace años ya. Yo recuerdo que mi madre se acababa de meter en una de las promociones, pensando en que podía ser una buena inversión. A los pocos meses de empezar a aportar estalló el escándalo y tomo la buena decisión de retirarse a tiempo.
Algo perdió, pero poco, aunque no recuerdo muy bien cómo fue.
Con lo de que funcionan como “una comunidad de vecinos” queda resumido el gran pero de esta alternativa…
TERRIBLE. SE ME HAN PUESTO LOS PELOS DE PUNTA.
Yo heredé mi piso y por ahora no he podido plantearme comprar otra vivienda, pero como las cooperativas funcionen como mi comunidad de vecinos vamos aviados. Como hubo desacuerdo no se adaptó el portal para minusválidos e igual pasó con la reparación de la cubierta. Las reuniones son interminables y muchas veces no se toma ninguna decisión, amén de los problemas con el cobro de las cuotas. He sido presidente durante 2009 y espero que nunca más.
Esto de las cooperativas de viviendas me parece más un cuento chino que otra cosa. Sabiendo como somos los españoles, no le veo yo mucha salida a la idea, a pesar de ser una buena idea. En términos teóricos funciona y el ahorro es más que significativo, pero el hecho de tener que lidiar con varias “cabezas pensantes” dificulta muy mucho la toma de decisiones. Y si no hay decisiones, los plazos se pueden eternizar.
Deja a los españoles McDonut , sino para todo el genero humano es inherente el ser egoistas , por tanto si hay algo que no es de beneficio para nosotros o simplemente lesiona , aunque sea un poco , nuestros intereses , hacemos todo lo posible para frustrar esa accion.
No me hables de las comunidades de vecinos, que este es otro tema que da para un post de los buenos. Yo vivo en un cuarto piso, de un edificio de unos cien años de antiguedad, y no hay forma de que los vecinos acepten el ascensor. Por más que les explicamos el tema de las subvenciones y demás, pasan de todo.
Cuando a los vecinos mayores les da por una manía, se lo toman como una batalla personal. Luego son los primeros que necesitan las reformas. Mi tío está en silla de ruedas en una casa de dos puertas donde no se puede poner ascensor. Quiso montar con su dinero un elevador en la barandilla pero la vecina dijo que el aparato ese le molestaba. Mi tío hizo caso omiso y lo instaló con permiso del ayuntamiento. Sin embargo, la vecina aburrida llamó a un arquitecto e hicieron que lo desinstalará por tener el hueco 5 centímetros menos de lo permitido.
Lamentablemente siempre existe el ocioso vecino que ha de poner trabas a algo que tu quieras realizar , por el mero hecho de que vive frustrado y no halla otra manera de desfogar ese sentimiento , que tratando de hace a las demas personas infelices, por tanto prevalece la individualidad , y jamas velamos por los intereses de la colectividad. Para que una cooperativa o la misma sociedad funcione de manera correcta , debe de haber una evolucion en nuestra idiosincracia , sino jamas podremos ver mas alla de nuestros requirimientos.
Hombre, si se puede ahorrar un 20 ó un 30 por ciento, pues es una opción a considerar muy seriamente. En cuanto a si van a funcionar como las comunidades de vecinos, yo casi que también prefiero pasar a tener que aguantar los quebraderos de cabezas y pamplinas que se dan en toda comunidad de vecinos (al menos las conocidas por mí).
Te volverá a tocar, por ley.
Yo vivía con mis padres en una capital de provincia, en un edificio céntrico con sólo 12 vecinos. Normalmente nadie quería hacerse cargo de la presidencia de la comunidad porque era un petardo y no se conseguía hacer nada. Llegó el primer año que le tocó a mis padres (a mi madre, más bien, que fue la que ejerció el cargo), y cuando acabó su presidencia, todos los vecinos querían que repitiera: arregló el tejado, cambió el ascensor, jubiló al administrador y al portero (puso una gestoría y un portero joven), cambió la caldera, y todo sólo con organizar las cosas y subiendo poco (muy poco) la cuota. Sölo había que distribuir e invertir bien la pasta.
Seguro que la cooperativa de viviendas es una opción estupenda para mucha gente pero para mí nunca estuvo entre mis planes.
Aparte de que he oído muy malas historias sobre timos y estafas, o sobre cooperativas en las que pagas y pagas y cuando ya recibes la vivienda te han salido canas, para mí era fundamental elegir la ubicación y otras características del piso, lo que hacía que la cooperativa fuera para mí como las VPO: casas que están bien pero si te adaptas a cómo son y donde están, sin muchas posibilidades de elegir.
Es un poco como la multipropiedad: suena muy atractivo y parece que todo sean ventajas, pero la realidad demuestra que no te puedes fiar ni de tu sombra. En estas situaciones en las que hay dinero -e incautos- de por medio, siempre aparece el espabilado de turno que quiere llevarse el “botín”.
Y en ese aspecto cual es la diferencia con un promotor, constructor, ayuntamiento, Primer comprador… etc…
No es por nada, pero a los derrotistas que ponéis en solfa a las cooperativas de viviendas, no sé realmente qué diferencia hay entre que el chorizo esté en la cooperativa o esté en el banco o en la promotora. Chorizos los hay en todas partes, pero buenas oportunidades para construir barato, no.
Por cierto, Ladríllez, y la constructora que hace el edificio, ¿no pretenderá sumar su margen y el del promotor? Porque si no estás espabilado en la negociación, te la meten doblada seguro.
Yo vivo en un VPO (me entregaron las llaves hace poco más de un mes) y si bien es cierto que hasta que no la ves no sabes a ciencia cierta cómo será, en mi caso estoy encantada y muy contenta con el resultado final, pero sé de otros que no han sido tan afortunados con el tema de acabados, orientación de la casa, etc.
Enhorabuena, señorita Itziar. Yo conozco a una pareja que también les han dado VPO en una zona que parecía sería tranquila, pero se han encontrado de repente con la sorpresa de que por allí cerca han instalado a gitanos conflictivos procedentes de chabolas…
hablas como un rico, Gonzalo
😀
Para muchas personas es mas plausible el pagar una cantidad mayor para obtener algun bien , a estar lidiando con la ideologia de alguna persona. Seran de mucho beneficio las cooperativas para algunos , pero yo si prefiero el evitar problemas con los individuos , pues casi nunca puedes alcanzar acuerdos.
Yo compré mi casa a través de una cooperativa de viviendas pero estoy teniendo muchos problemas. El suelo que asignaron a mi cooperativa estaba asignado también para otra y hubo una guerra entre cooperativas; al final ganó la mía pero esa discusión demoró mucho el proceso.
Llevo pagando cuatro años y medio y todavía no están terminados los pisos porque no hay dinero para construirlos. Me arrepiento de haber usado este sistema, aunque a priori era más barato que otros, porque al final no sé cuándo recibiré la casa ni si llegaré a verla terminada algún día.
Antes comprar a través de cooperativa era la solución para mucha gente como yo pero he visto que fue un error y que ahora mismo es mejor comprar pisos de segunda mano.
Si es de todos, no es de nadie.
Esa es la dinámica real…
Y así nos va, por supuesto…
Supongo que habrá de todo, pero yo he pertenecido a una cooperativa de viviendas y en mi caso la experiencia no ha sido buena. El proceso de construcción se dilató nada menos que siete años y las reuniones de los cooperativistas eran de locura, porque nadie estaba de acuerdo en nada. Hubiera preferido pagar algo más y haberme dejado de líos.
Al final tiene razón Ladríllez: lo que ahorraste en el piso, lo gastaste en psiquiatra…
os reciuurdo que no sólo hay que discutir, sino discutir con los que serán tus vecinos…
Bueno Mirabel por medio de tu experiencia has adquirido el conocimiento de que no funcionan de manera adecuada este mecanismo para obtener vivienda , aqui la cosa es que a ti ya no te ayuda de mucho el saberlo , y para los demas tampoco , pues aunque alguien les diga “no hagas tal cosa no te conviene entrar a una cooperativa” , ellos hacen caso omiso.
Parece que lo barato al final sale caro…Gracias a todos por compartir vuestras experiencias. Después de lo que he leído me parece que lo de las cooperativas de viviendas es un asunto que voy a desechar de mis planes futuribles.
hola como estas quieres perrear con migo
Es cierto que las cooperativas de viviendas (pongamos algunas, por aquello de no meter todas en el mismo saco) dan verdaderos quebraderos de cabeza, pero el verdadero problema es que la gente intenta buscar fórmulas que le permitan ahorrarse algo de dinero porque realmente es impresionante el tener que pasar más de la tercera parte de tu vida pagando una casa.
Tan impresionante como, a estas alturas, tener que comer a diario…
Pero es lo que hay…
Todos y cada uno de lo puntos que has contado acerca del asunto de la cooperativas los he visto afortunadamente desde la barrera, con un par de compañeros del trabajo. Líos con el ayuntamiento en la concesión de terrenos y licencias, problemas en la búsqueda de financiación, que si la abuela fuma… total, que han pasado más de 7 años y aun no estan terminadas las viviendas.
Y lo que comentas de que si sale una buena oferta de terreno, en una zona maja de la ciudad, estoy 100% de acuerdo que esas se las van a llevar los amiguetes y untados de siempre.
Me imagino que al final en esto de las cooperativas de viviendas habrá de todo como en botica y que las cosas negativas son las que más trascienden a la luz pública. Yo personalmente cuando me tocó buscar vivienda no miré nada en las cooperativas más que nada por la dilatación en los plazos de entrega.
A todos los que he leído arriba les ha ido un poco torcida la cosa en el asunto de la coopeativa… es qué no habrá nadie a quien le haya salido bien la cosa? 😀
Hipotecados saludos.
Y9o no conozco a nadie que le haya ido biemn, pero los habrá… Supongo… en otro mundo… 🙂
Yo este año me acabo de comprar un piso de cooperativa, en una buena zona y por la baja de un cooperativista. Normalmente tendrían que haber entregado los pisos el mes de noviembre del ’09 y ahora según parece será febrero ’10, y ya llevan 6 años. Y según les dijeron serían 2 o 3 años de construcción.
En este tema de las cooperativas se tiene que saber muy bien donde uno se mete y si merece la pena el tiempo.
Y sobre tu pregunta, no he visto ha nadie que le hayan entregado sus pisos de cooperativa en el plazo previsto, ni siquiera de cerca.
Yo creo, “Rápido”, que sobre todo hay que contar que puede pasar mucho tiempo antes de que tengas la vivienda. Es decir, que hay que tener un “plan B” por si las cosas no van como estaba previsto, o al menos un colchón económico que nos permita la espera. Mis tíos esperaron diez años por su vivienda por cooperativa. Ahora están felices, pero tuvieron que venirse a vivir con nosotros los dos últimos años.
La idea de cooperativa es tan buena como incompatible con nuestro carácter. Con eso creo que resumo mi opinión.
Es normal que todo el mundo intente comprar las casas lo más barato posible, pero como todo en esta vida, al final hay que ver si merece la pena dejarte la salud en el empeño. Y de todas formas, con las VPO yo he visto cosas muy parecidas, así que no son sólo las coopertativas de vivienda las que salen mal.
La opción de comprarte un piso de segunda mano es, desde mi punto de vista casi la mejor hoy día; aunque tengas que arrear con las consabidas reformas, al final pones la casa a tu gusto y además no fomentas la construccion de más inmuebles, que es algo de lo que actualmente vamos sobrados
Eso mismo pienso yo, y si es eln el medio rural, te sale casi de balde.
Tiene sus pegas, pero eres libre.
Aunque bien pensado… Ser libre también tien sus pegas…
🙂
Desde mi punto de vista también es lo mejor. Y si es sin inmobiliarias de por medio se puede encontrar alguna cosa que no esté muy mal de precio. Hay algunos pisos donde hay que reformarlo todo y en otros no tanto o más bien poco. Y si encuentras uno medio qué, con dos retoques tienes una fabulosa casa y no tienes que gastarte el dinero ni en muebles siquiera.
Estoy con vosotros, Rural y Carmelo. Yo he optado por una vivienda de segunda mano y estoy feliz con ella, pero eso sí, tuve que informarme muchísimo porque estaba pez en el tema. Gracias al cielo mi tío es dueño de una inmobiliaria y me asesoró estupendamente, aunque él mismo dice que hay que andar con ojo cuando se trata con inmobiliarias.
No tenía ni idea acerca de las cooperativas de vivienda. Es más, creo que es la primera vez que oigo hablar del tema. Sin embargo, me parece una alternativa interesante, si se conoce a personas de confianza con quien compartir el proyecto.
Yo tampoco conocia la opción pero vamos creo que es muy complicado, no se si de verdad se encontraría gente “de confianza” para compartir el proyecto, en cuanto hay dinero por el medio el tema de la confianza y del “buen rollo” es complicado. Al final como bien dice el articulo, lo que ahorras lo acabarias gastando en aspirinas.
¿Personas de confinza?
Vale. ¿Dónde?
Ojalá fuera cooperativa para poder tener “tropecientasmil” hipotecas para mí solito. Y no sólo varias hipotecas, sino la promoción y la construcción de los inmuebles, el papeleo, los sobornos, las comilonas con los concejales de urbanismo… Todo para mí. Sería como un sueño hecho realidad.
Perdona, pero me extravié…
El problema de este tipo de compras sobre plano ha sido que, al haber pagado por adelantado, los plazos se han alargado. Muchos constructores prefirieron invertir ese dinero que ya tenían en construir otros pisos y la cosa se fue alargando hasta el boom inmobiliario. ¿Qué pasó en muchos casos? Que los precios pagados eran inferiores a los que se pagaban entonces y no convenía acabar la obra. Después estalló todo y muchas de esas empresas se han ido a la ruina.
Los plazos largos es lo que tienen. Por eso unos ganan y otros pierden en la Bolsa.
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Ponerse de acuerdo con otros es a menudo lo más caro de todo. Pagar suele resultar más barato.
Las cooperativas de vivienda pueden ser una alternativa para poder ser poseedor de una propiedad , pero hay que ser cautelosos pues a veces lo que mucho brilla no es oro sino pirita, por tanto se tiene uno que guiar con prudencia en este asunto , y estar dispuesto a asumir las responsabilidades que ha de conllevar. El tratar de llegar a acuerdos suele ser frustrante , pues cada quien lo vera desde su individualidad , no importando los intereses de la otra persona , asi que la toma de decisiones beneficiosas , es lo mas complicado que le veo a las cooperativas.
Hasta ahora todo lo dicho no te lo quita ninguna otra formula de promoción. Los problemas de cabeza te los da la compra sobre plano. Si bien es más barata y con el tiempo y una vez que tienes tu casa se te pasan y se te olvidan los problemas. Yo me arrepiento de no haber comprado en una cooperativa de un amigo que aunque tardaron cinco años y el precio subió 12.000 € ahora mis amigos estan pagando una hipoteca de 130.000 € y casi no notan la crisis por que le gestionaron unas condiciones muy buenas. Sufrieron tela, las reuniones de peleas, las calidades bajas, atraso de 5 años… pero cuando subieron los tipos ellos podian pagar y les salió bastante bien. Dependerá de quien y como se haga supongo y si compensa tanto alboroto, aunque total forma parte de la educación que nos venden como la que hay que tener y si no ver la tele cada noche.
Como en todo, hay que arriesgar para ganar. En general he oído muchas críticas de las cooperativas de viviendas, pero también tengo unos amigos en Canarias que compraron así y no han tenido queja salvo en que tardaron dos años más de lo previsto en irse a vivir al piso. Yo no optaría por esta fórmula, pero tampoco yo soy una persona arriesgada.
hola nosotros hemos formado una cooperativa hace un año, ahora por fin el banco nos dará el crédito , para construir empezamos con un precio y ya hemos rebajado los costes manteniendo las calidades, esto es un milagro ya que es una población de Barcelona donde el m2 no es nada barato esta bien situado junto las ramblas del pueblo, llevábamos tiempo queriendo encontrar una vivienda mejor que la que teníamos no lo hicimos anteriormente porque nos pareció que los precios estaban sobre valorados imagino que hemos tenido la paciencia suficiente a pesar de que el día a día no era nada fácil. solo espero que no sea un sueño del cual un dia despierte y me encuentre eso, que fue un sueño aunque dejo secuelas.