Archivo por años: 2014

Ya ni las hipotecas aguantan la morosidad

Morosea que algo queda

Morosea que algo queda

Esta crisis que todo lo puede está hundiendo todos los parámetros habituales con los que nos solíamos manejar en términos económicos y financieros. Si cada día nos encontramos con una nueva sorpresa que llevarnos a la boca, ahora nos encontramos con que la tasa de morosidad hipotecaria también se ha empezado a disparar.

Hasta hace bien poquito nos habían vendido la cantinela de que los españoles preferían quedarse sin comer a dejar de pagar la hipoteca, algo que garantizaba los pago a las entidades financieras. Sin embargo, parece que esto ha cambiado a juzgar por los nuevos datos de morosidad hipotecaria que han hecho que las grandes entidades financieras se empiecen a llevar las manos a la cabeza.

Si en 2012 el volumen de créditos hipotecarios que manejaban las principales entidades financieras de este país, concretamente las que cotizan en el Ibex 35, es decir, Banco Santander, BBVA, CaixaBank, Bankia, Banco Popular, Banco Sabadell y Bankinter, manejaban un volumen de 17.204 millones de euros en créditos hipotecarios morosos, en 2013, y según los datos del Banco de España, esta cifra se ha disparado hasta los 24.539 millones de euros, o lo que es lo mismo un crecimiento del 42%.

Unos datos que no dejan de ser tramposos, como bien apuntan gran cantidad de expertos económicos, y es que las entidades financieras maquillan sus cuentas con las viviendas que se quedan en propiedad. Es decir, imaginemos que una familia no puede pagar la hipoteca, entonces estaría dentro de estos volúmenes de créditos morosos. Pero al cabo del tiempo, la entidad financiera de turno se apodera de la vivienda con lo que el crédito hipotecario desaparece y así la deuda deja de ser hipotecaria.

Con esta pequeña triquiñuela los bancos y cajas van maquillando sus cuentas para poder satisfacer los intereses de sus accionistas y poder presentar así mejores cuentas ante ellos, lo que garantiza cierto estado de tranquilidad.

En definitiva, tantos años de crisis están haciendo mella en todos los sectores, y en el sector financiero más que en ninguno, como causante original de la crisis y por tanto el que debe de sufrir en mayor grado las consecuencias, aunque hasta ahora no se hayan producido en su justa medida.

El IPC se mantiene en febrero respecto al mes anterior

Euribor El Indice de Precios al Consumo (IPC) permaneció sin cambios en febrero en relación al mes anterior, osea que los precios no cambiaron respecto a enero. Con esta estabilidad mensual el IPC situó su tasa interanual en el 0%

Sube Ocio y cultura

Respeto a las clases que suben de precio este mes tenemos en cabeza al grupo de Ocio y cultura en un 0,7% y al grupo de Otros bienes y servicios, que registró un alza mensual del 0,6%.

Por rúbricas, destacan las subidas mensuales de Frutas en conserva y frutos secos (1,3%), Servicios para el hogar (1,2%), Servicios médicos y similares (1,1%), Transporte público interurbano (0,8%), Turismo y hostelería (0,5%) y Bebidas alcohólicas (0,4%).

En términos interanuales, los productos que más incrementaron los precios corresponden a Frutas en conserva y frutos secos (7,1%), Pescado fresco y congelado (6,8%), Leche (4,4%), Crustáceos, moluscos y preparados de pescado (4,3%), Tabaco (3,4%) y Educación universitaria (3,3%).

Bajan los precios de Vestido y calzado

Por otro lado, protagonizan los descensos mensuales Vestido (-1,7%), Calzado y sus reparaciones (-1,7%), Artículos de uso personal (-0,7%), Equipos y soportes audiovisuales, fotográficos e informáticos (-0,7%), Alimentos (-0,4%) y Servicios hospitalarios (-0,4%).

Por rúbricas, los descensos mensuales más pronunciados de precios correspondieron a Carne de ovino (-3,3%), Aceites y grasas (-2,8%), Calzado de hombre (-2,2%), Frutas frescas (-2%), Prendas de vestir de niño y bebé (-1,9%) y Prendas de vestir de hombre (-1,8%).

Anualmente el abaratamiento lo encabeza Comunicaciones (-6,8%), Objetos recreativos (-4,3%), Azúcar (-3,7%), Huevos (-3,1%), Aceites y grasas (-2,3%) y Transporte personal (-2%).

Por comunidades autónomas, diez de ellas bajaron sus precios en febrero respecto a enero. A la cabeza de este descenso estaría Melilla (-0,2%), Cantabria (-0,2%), Castilla La Mancha (-0,2%) y Euskadi (-0,1%).

El IPC en las comunidades autónomas quedaría asi:

Autonomía Variación mensual Variación anual
Andalucía 0% -0,2%
Aragón 0% -0,2%
Ceuta 0% 0%
La Rioja 0% -0,1%
Canarias 0% -0,2%
Madrid 0% -0,1%
Navarra 0% -0,4%
Murcia 0% -0,1%
Cataluña 0% 0,2%
Asturias -0,1% -0,2%
Islas Baleares -0,1% 0,4%
Castilla y León -0,1% 0%
Com. Valenciana -0,1% -0,2%
Extremadura -0,1% -0,4%
Galicia -0,1% 0,2%
Euskadi -0,1% 0,5%
Castilla La Mancha -0,2% -0,2%
Cantabria -0,2% 0,1%
Melilla -0,2% -0,6%

Por su parte la inflación subyacente, que no incluye los precios de los productos energéticos ni de los alimentos elaborados, elevó anualmente hasta situarse en 0,1%.

Pulsa en Evolución del IPC para ver todo el historial del IPC

La hipoteca y la sensación de pobreza

Bombillas apara aumentar la sensación de tristeza...

Bombillas apara aumentar la sensación de tristeza…

Voy a hablar de riqueza y de sensaciones económicas, aunque muy podría referirme también a pobreza moral, esa condición que estamos adquiriendo poco a poco, sin que podamos echarle la culpa a la crisis. De hecho, voy a empezar por ahí…

Hace apenas una semana, se encontró muerta a una mujer en las Vegas después de que se le agotara el dinero en la cuenta del banco. ¿Y es que se había suicidado pro quedarse sin dinero? No. Lo que sucedía era que llevaba seis o siete años muerta, pero como seguía pagando sus recibos, nadie se había preocupado por ella. Comenzaron a llamarla y a intentar visitarla cuando el dinero se agotó y algunas facturas comenzaron a devolverse. Dicho esto, dicho todo, ¿no os parece?

Pero no obstante, insisto, creo que tengo que hablar de pobreza material.

Estamos ya en plena deflación. La vivienda ha bajado del orden de un 35% y los salarios, aunque no han ido tan abajo, llevan el mismo camino. La gente no sólo no tiene dinero, sino que si preguntas por ahí te dicen que no cree que vaya a tenerlo en algún tiempo. No ha bajado sólo la riqueza, sino también la esperanza…

Esto tiene un doble efecto: no sólo somos más pobres, sino que además nos sentimos más pobres, con lo que la demanda se resiente doblemente. ¿Y qué ocurre con las hipotecas? Pues lo mismo y por ese mismo camino.

A medida que los pisos bajan, en lugar de ser más asequibles se convierten en más difíciles de comprar, pues disminuye el número de compradores potenciales a los que los bancos consideran “clientes cualificados“, que son aquellos a los que se les puede prestar el dinero sin riesgo de que en una prueba de estrés cualquiera se entienda que ese préstamo es dudoso.

Y por el lado de los bancos, el balance gime lo mismo que el bolsillo de los ciudadanos: a medida que lso pisos se devalúan, resulta que el dinero que se prestó se ha ido de la caja y lo que quedó en su lugar, que es un piso como garantía, vale cada vez menos. De ahí la situación famélica de las cuentas bancarias.

Por tanto, la deflación de precios y salarios genera un efecto pobreza para todos: para los ciudadanos, porque los ahorro de toda la vida, a menudo invertidos en un piso, valen cada día menos, y para los bancos, porque las hipotecas que que sirven de soporte a sus préstamos valen también cada día menos.

O sea que nada de pensar en dos bandos: cuando baja el nivel del agua, corren peligro de ncallar todos los barcos. Tanto los grandes como los pequeños. Y primero los grandes…

 

 

 

¿A qué se debe la guerra de las hipotecas?

Esta es la guerra!!!!

Esta es la guerra!!!!

¿No te has enterado? ¡Qué sí, qué sí! Que se ha iniciado una guerra en toda regla por parte de las entidades financieras por captar a los pocos osados que se atreven a lanzarse a por una hipoteca, una guerra que todavía no tiene vencedores y que promete no dejar enemigos vivos por el camino.

La clave parece estar en ofrecer diferenciales por debajo del 2%, con lo que se pueden manejar hipotecas por debajo del 3%, aunque la mayoría está marcando suelos del 3%, para evitar el desmadre que pueda hundirlas aún más, pero en cualquier caso se trata de hipotecas realmente atractivas, especialmente en los tiempos que corren.

Pero, ¿tienen trampa?

Por supuesto que sí, no te vayas a dejar engañar. Tienes que tener en cuenta que las entidades financieras salieron escaldadas de la burbuja inmobiliaria que ellas mismas generaron y ahora se cuidan muy mucho a la hora de conceder una hipoteca.

Así que no te creas que todos podremos acceder a estas hipotecas baratitas, baratitas, nada de eso, están reservadas para gente con gran poder adquisitivo, o al menos con la capacidad suficiente como para hacer frente a todas las garantías que exige la entidad financiera.

Y, ¿a qué se debe esta guerra?

El mayor negocio de las entidades financieras, no nos engañemos, son las hipotecas, ya que es la mejor forma de tener a un cliente durante largo tiempo, cobrándole unos intereses más que interesantes para ellos a la vez que se le pueden ir vendiendo diferentes productos a través de la venta cruzada.

Con ello se busca la fidelización del cliente con la entidad, algo cada vez más difícil de ver, y de esa manera las entidades pueden obtener beneficios, no ya solo en el corto plazo, sino, sobre todo, en el medio-largo plazo, con todo lo que ello les puede reportar.

En definitiva, la guerra está servida, y nosotros somos la carnaza, es el momento de ser inteligentes y aprovecharse de este nuevo fenómeno sin caer en los mismos errores del pasado. Recuerda que los bancos y cajas solo quieren ganar dinero, y para ello tú lo tienes que perder, no hay otra alternativa.

La hipoteca y el tío que pasea

Pues busqué el paso de la oca y salió esto...

Pues busqué el paso de la oca y salió esto…

A ver si el señor Rajoy se entera de una vez: un líder sin seguidores es un tío que pasea.

Si nuestro Presidente se enterase de eso comprendería el por qué de tanta desafección entre sus ciudadanos, de tan poco aprecio entre sus votantes y la altísima intención de abstención entre los que le apoyaron la última vez.

Y con las hipotecas pasa igual.

Un banco que no da préstamos, es una churrería sin humo. Un banco que no se dedica a tomar el dinero de muchas personas, pagar un interés a los depositantes y prestar más tarde ese dinero a un interés superior al pagado, se sigue llamando banco, pero ha dejado de serlo en el modo en que lo conocíamos para dedicarse a otra actividad. Y la naturaleza del negocio debe de ser del todo inconfesable, puesto que no hay quien quiera meterse a describirla.

¿Y qué está pasando? Pues un poco eso. Que nos dicen que el crédito a las empresas mejor a un poquito, y que mejora también un poco, mínimamente, la concesión de hipotecas, peor luego resulta que si nos ponemos a mirar los requisitos para estas operaciones y las condiciones de solvencia para los clientes a los que van dirigidas, nos quedamos otra vez encogidos de hombros: empresas públicas, o clientes subvencionados, como los jóvenes a los que en algunas comunidades autónomas se les dan subvenciones para su primera vivienda.

¿Tenemos entonces un negocio bancario o hipotecario? ¿Tenemos algo que se parezca a instituciones financieras, que recogen el ahorro y lo canalizan para convertirlo en inversión, como dice la teoría clásica? No. Tenemos no sé qué, montando una vez más no sé sabe cual tejemaneje para ganar dinero si se puede o conseguir que lo paguemos a escote si se pierde, como ya sucedió. Si esta vez el plan pasa por cobrar las pérdidas de antemano, a través de subvenciones, en vez de cobrarlas a posteriori a través de rescate, pues oye, ¡que me alegro”!

Pero no, de momento, con las condici0nes que vemos, los intereses que pagan por las cuentas corrientes y los requisitos que ponen para conceder una hipoteca a un tipo normal de la calle, no consiguen convencerme de que un banco es un negocio normal que hace operaciones normales.

Nuestros líderes son tíos que pasean y nuestros bancos, pues no sé… mejor no pensarlo.

El euribor de febrero baja al 0,549%

Euribor Cerrando el último día del mes laborable y puntuable para el euribor, podemos decir que el euribor en febrero cerró con un valor medio de 0,549%. Este valor medio del euribor es, el que a falta de confirmación por el Banco de España, se tomará como referencia para la revisión de hipotecas en la mayoría de los casos.

El Euríbor cambia en este mes de febrero la tendencia bajando, ya que el mes pasado efectuó una subida.

El euribor baja en 0,013 puntos respecto al mes de enero. Pero la diferencia que nos interesa a la mayoría de los hipotecados es la diferencia del euribor anual, ya que esta es la que dirá si nos baja o sube la cuota de la hipoteca en nuestra revisión anual: Esta ha sido una bajada en 0,045 puntos.

¿Cómo afecta a la Hipoteca el Euribor de febrero? Esto se traduce en un abaratamiento en la cuota mensual de las hipotecas que les toque revisarse en febrero respecto a la de hace un año:

Ejemplo 1: El títular de una hipoteca de 180.000 euros a 25 años que revise su préstamo anualmente, comprobará que su cuota de hipoteca mensual disminuye en 4 Euros, o lo que es lo mismo, 48 euros menos al año.

Ejemplo 2: Una hipoteca de 200.000 euros a 30 años, comprobará en la revisión que su cuota baja en 4 Euros, o lo que es lo mismo, 48 euros menos al año.

La revisión de las hipotecas normalmente son anuales o semestrales y se hacen respecto al euribor publicado oficialmente en el mes que toque la revisión. Para saber en que mes toca hay que mirar las escrituras o el contrato hipotecario. Para calcular la cuota pulsa en este enlace:

Revisión de la Hipoteca

¿Es posible seguir cayendo?

Esto no hay quien lo pare

Esto no hay quien lo pare

Cada vez que escuchamos, hablamos o escribimos sobre un dato económico relacionado con el sector inmobiliario acabamos diciendo que puede ser el fondo, que a partir de ese momento podemos encontrarnos con el inicio de la recuperación, con el comienzo de la luz, una luz que siempre acaba por estar demasiado lejos y a un punto absolutamente inalcanzable.

Sin embargo, luego nos bombardean con un nuevo dato que no hace sino que nos comamos nuestras propias palabras y que acabemos por tener que reescribir todo lo escrito y volver a hablar de lo mismo, que los datos marcan un mínimo histórico, que a partir de ese momento comienza la recuperación, y volvemos a la casilla de salida.

Y es que esta crisis se está demostrando como realmente demoledora, y basta con echar un vistazo a los datos que acaba de publicar el INE sobre las hipotecas constituidas durante el pasado año 2013 y nos encontramos con una caída del 27,8% en términos interanuales, para cerrar el ejercicio con un total de 197.641 nuevas hipotecas, lo que significa un mínimo histórico, sí, sí, otra vez.

Con esta caída ya son seis años en los que las hipotecas constituidas han ido cayendo sin solución de continuidad, y aunque es cierto que nos encontramos un poco mejor que en 2012, cuando cayó un 33%, todavía estamos en unos valores insostenibles a todas luces, ya que la constitución de nuevas hipotecas es fundamental para el mantenimiento del negocio financiero.

Y es que no solo ha caído el número de hipotecas, sino, como no podía ser de otra manera, también el importe de las mismas, concretamente un 3,5% hasta situarse en los 99.838 euros, un descenso que viene motivado en gran medida por la caída de precios que sigue sufriendo el mercado inmobiliario español y cuyo fin los expertos llevan años anunciando sin éxito real.

En definitiva, nos pueden vender las milongas que quieran, pero lo cierto es que todavía nos encontramos en caída libre y nada hace presagiar que la cosa pueda llegar a cambiar en breve.

El importe medio de las hipotecas constituidas sobre viviendas bajó un 3,5% en 2013, hasta los 99.838 euros, mientras que el capital prestado se redujo un 30,3% en el conjunto del año

El clima como factor a la hora de elegir vivienda

Mapa de la pobreza energética

El precio de la energía es un factor tan determinante a la hora de elegir residencia que el mercado se ve distorsionado por sus fluctuaciones más de lo permisible.

Hoy, además de la hipoteca y otros modos de pagar la vivienda, vamos a acercarnos también a otro tipo de problemática que se empieza a hacer cada vez más aguda con las abusivas subidas de la electricidad y el modelo de planificación energética que disfrutamos.

Hoy vamos a hablar de pobreza energética.

El concepto de pobreza energética ha pasado en poco tiempo de ser un absoluto desconocido a figurar en la primera línea de todas las discusiones sobra acción social, redistribución de renta y problemática ambiental.

Como idea, la pobreza energética se acuñó en Gran Bretaña a finales de los años ochenta y se considera pobres energéticos a los consumidores que destinan más del 10% de sus ingresos a pagar las facturas de energía o que no logran mantener sus viviendas a 20ºC en invierno o 25ºC en verano. Estas temperaturas, por supuesto, son orientativas, y sirven para tomar medidas homogéneas así que no vamos a entrar a discutir ( y se podría) si no son un verdadero exceso o se trata de unos mínimos.

La pobreza energética implica >varios impactos sociales, sanitarios y medioambientales. En una casa mal climatizada, las personas están más expuestos a problemas de salud relacionados con el frío y la humedad. Los enfermos crónicos, niños y ancianos son los más afectados.

Una de las causas principales de la pobreza energética es la mala calidad de las viviendas, pero la principal es la creciente escasez de energía y su encarecimiento progresivo, por vía de precios o por vía de reducción de salarios, que son las dos maneras que nos están llevando a ser más pobres cada día.

Según la Asociación de Ciencias Ambientales, la pobreza energética puede estar causando en España entre 2500 y 9000 muertes prematuras al año, una cifra muy superior a la que causan los accidentes de tráfico y que no deja de incrementarse año tras año debido al raro vodevil de nuestras tarifas eléctricas.

La gran pregunta que ahora se plantea el ciudadano es si vale la pena ahorrar energía o no. Seguramente sigue valiendo la pena, pero la estrategia de las eléctricas consiste en transmitirnos la idea de que podemos ahorrar electricidad, pero no dinero, y precisamente para lograr ese objetivo cargan todas las subidas sobre las cuotas mínimas en vez de hacerlos sobre las tarifas de consumo o precio por kilowatio.

¿Y por qué hablo hoy de este tema? Porque la compra de vivienda, la hipoteca y todos los cálculos que apareja se están viendo cada días más condicionados por el precio de los suministros domésticos, dejando la renta disponible en cantidades ridículas.

Y así no hay recuperación posible

¿Y se sorprenden de que aumente la morosidad?

¿Cómo no vamos a pagar?

¿Cómo no vamos a pagar?

Si es blanco y viene en botella debe de ser leche, se supone, así que no se entiende la razón de la sorpresa por el aumento de la morosidad de las entidades financieras, alcanzando un máximo histórico para cerrar el año 2013, concretamente el 13,6%, dato ficticio a todas luces, porque no tiene en cuenta los datos del Sareb, el banco malo.

Si contabilizáramos los datos del Sareb, estaríamos hablando de una morosidad que se estaría disparando al 16%, algo totalmente insostenible pero que no debería de pillarnos por sorpresa ante la situación económica que estamos atravesando.

El número de familias que subiste sin saber muy bien como, ya que no tienen ningún tipo de ingreso mensual sigue aumentando y con ello el número de recibos hipotecarios que quedan al final del cajón sin pagarse, por lo que no sería de extrañar que este índice siguiera aumentando en los próximos meses.

Pero la paradoja de esta historia es que muchos de estos préstamos morosos están en manos de entidades financieras que han sido rescatadas por el Gobierno, es decir, con el dinero de los impuestos recaudados entre los ciudadanos de a pie, paradójico, digo, porque los mismos ciudadanos que deben dinero a las entidades, siendo, por tanto, morosos, han contribuido a la salvación de la propia entidad.

No son pocas voces ya las que claman al cielo con esta situación y reclaman una carencia permanente para los créditos de las entidades rescatadas, porque es un sin sentido absoluto, de manera que estas entidades no se beneficien del dinero de todos los españoles para luego echarles de sus propias viviendas.

En este mismo sentido, todos los economistas coinciden en la necesidad de reactivar el sistema crediticio español, siendo la mejor forma de conseguirlo empezar con estas entidades rescatadas, de forma que el dinero que han recibido tenga cierta condicionalidad, es decir, que deba de ser destinado a fines concretos, en este caso a dinamizar el crédito en España.

Pero estamos en el país que estamos y no podemos pedirle peras al olmo, se trata de una situación insostenible y la mediocridad de los gobernantes de turno no hace sino agravarla, aunque todos deberíamos de dejar de mirarnos el ombligo y entender que nuestros políticos provienen de nuestra propia sociedad, son la imagen y semejanza de la sociedad que gobiernan.

Renegociación de hipoteca. Una estrategia posible

Tampoco les gusta que sueltes de golpe..

Tampoco les gusta que sueltes de golpe..

Cuando se habla de estas cosas, el principal problema es que somos tos unos pequeños pringadetes con pequeña o nula capacidad de presión, pero lo cierto es que la actual situación de los bancos convierte nuestro problema hipotecario en algo mucho más complejo que pagar o esperar a que te embarguen.

Vamos a ver la cuestión un poco más de cerca a ver si así nos hacemos una composición de cuales son nuestras posibilidades:

En el año 2008, la crisis de Lehman Brothers dio el pistoletazo de salida al gran pánico financiero o, si se prefiere, al nuevo paradigma económico. Lo de Lehman fue sólo una erupción cutánea, porque el problema era mucho más profundo y extendido, y aunque se echó la culpa a las hipotecas subprime, había mucha más porquería en el sistema financiero. Y la sigue habiendo.

Y con eso cambió la mecánica de las cosas. El dinero ya no era sólo dinero, sino también masilla para cubrir un boquete en el balance. Y resultó que las pérdidas eran sólo una faceta de todas las posibles maneras de irse a tomar viento, con el añadido de que a nivel legal y político era mejor tener pérdidas que un mal balance.

La cuestión es que, en el nuevo orden de las cosas, a veces los bancos valoran más el balance que la disciplina y que, puestos a reducir los daños, prefieren negar que la pérdida existe antes que intentar cobrare lo que se pueda de esa deuda. ¿Cómo se expresa eso en el mundo real? Renegociando créditos y renegociando hipotecas, incluso con gente que saben que no las pagará nunca, porque de lo que se trata es de que las provisiones no haya que hacerlas ahora y de que la pérdida posible no se convierta en pérdida real.

Por tanto, sabiendo esto, si tenemos problemas con la hipoteca, la estrategia a seguir es asegurar cualquier cosa y de cualquier manera, inventarse la garantías si hace falta, pero tratar de posponer el problema. Es lo que necesitamos nosotros y muy posiblemente también lo que ellos necesiten.

Todo lo que sea hablarles de lo malos que son, lo mucho que nos esforzamos y el daño que nos hace que nos quiten la casa será tiempo perdido. Pero si algo puede funcionar es intentar convencerlos de que poco a poco pagaremos. De que si nos bajan las cuotas y nos suben el número de años, podemos seguir pagando. Y de hecho, hay que seguir pagando, poco a poco,  para sostener esta estrategia. Una estrategia que se parece peligrosamente a la suya: tirar del calendario para adelante a ver si llega un milagro o un rescate.

Y a lo mejor existe tal cosa. Hablaremos de ello otro día…

 

Mitad de febrero de 2.014: Euribor al 0,55%

Euribor La tendencia del euribor en febrero es a bajar. Esto es así comparando su valor mensual medio actual que es de 0,55% respecto al valor del mes pasado.

De cerrar asi el euríbor cambiaría en este mes de febrero la tendencia bajando, ya que el mes pasado efectuó una subida.

El año pasado cerró con un valor de 0,594% en febrero, lo cual supondría, de cerrar así, una diferencia de 0,044 puntos menos

Revisión de la hipoteca:Si el euribor terminara con este valor de 0,55, y tuvieramos un préstamo hipotecario por un importe medio de 180.000 euros, un diferencial del 1,5% y un plazo de amortización de 25 años, que hasta ahora soportaba una cuota mensual de 772 euros, que al revisarse con el euríbor conocido hoy obtendrá una reducción de casi 4 euros al mes, lo que supone 48 al año.

El IPC baja un punto y tres décimas en enero, hasta el 0,2%interanual

Euribor El Indice de Precios al Consumo (IPC) bajó en enero un -1,3 en relación al mes anterior, y situó su tasa interanual en el 0,2%, inferior a la registrada en diciembre, según ha informado el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Vestido y calzado, lo que más baja.

El abaratamiento mensual de enero se ha debido sobre todo, a la bajada en el grupo de Vestido y calzado en un 14,9% y al grupo de Ocio y cultura, que registró un abaratamiento mensual del 2,1%.

Por rúbricas, los descensos mensuales más pronunciados de precios correspondieron a Prendas de vestir de hombre (-17,1%), Prendas de vestir de mujer (-17%), Complementos y reparaciones de prendas de vestir (-13,9%), Prendas de vestir de niño y bebé (-13,3%), Calzado de mujer (-10,8%) y Calzado de niño (-9,6%).

En términos interanuales, los productos que más se abarataron fueron Comunicaciones (-6,9%), Carne de ovino (-5,2%), Objetos recreativos (-4,2%), Azúcar (-3,4%), Huevos (-3,3%) y Carne de ave (-1,8%).

Suben los precios de Vivienda

En el lado de los ascensos mensuales destaca Seguros (1,2%), Electricidad, gas y otros combustibles (0,8%), Otros servicios relacionados con la vivienda (0,6%), Otros servicios (0,5%), Alimentos (0,4%) y Bebidas no alcohólicas (0,2%).

Por rúbricas, destacan las subidas mensuales de Pescado fresco y congelado (5,6%), Frutas frescas (1,4%), Frutas en conserva y frutos secos (1,2%), Servicios médicos y similares (1%), Calefacción, alumbrado y distribución de agua (1%) y Transporte público urbano (0,9%).

Los ascensos anuales más significativos se registraron en los precios de Frutas en conserva y frutos secos (6,3%), Leche (4,7%), Crustáceos, moluscos y preparados de pescado (4,1%), Tabaco (3,8%), Pescado fresco y congelado (3,5%) y Educación universitaria (3,2%).

Por comunidades autónomas, diecinueve de ellas bajaron sus precios en enero respecto a diciembre. A la cabeza de este descenso estaría Melilla (-2,1%), La Rioja (-2%), Ceuta (-1,8%) y Navarra (-1,8%).

El IPC en las comunidades autónomas quedaría asi:

Autonomía Variación mensual Variación anual
Islas Baleares -0,9% 0,5%
Canarias -1% -0,2%
Cataluña -1,1% 0,3%
Madrid -1,2% 0,2%
Com. Valenciana -1,3% 0,1%
Euskadi -1,4% 0,6%
Aragón -1,4% 0%
Castilla y León -1,4% 0,3%
Extremadura -1,4% -0,1%
Cantabria -1,4% 0,3%
Castilla La Mancha -1,5% 0,1%
Andalucía -1,5% 0,1%
Galicia -1,5% 0,4%
Asturias -1,6% 0%
Murcia -1,7% 0,2%
Navarra -1,8% -0,4%
Ceuta -1,8% 0%
La Rioja -2% 0%
Melilla -2,1% -0,2%

Por su parte la inflación subyacente, que no incluye los precios de los productos energéticos ni de los alimentos elaborados, elevó anualmente hasta situarse en 0,2%.

Pulsa en Evolución del IPC para ver todo el historial del IPC